Cáritas Valencia atendió el pasado ejercicio a más de 30.000 personas migrantes, la mayoría en los proyectos de Acogida parroquiales o los específicos para la atención de personas migrantes. En este sentido, el 61 por ciento de las personas atendidas por la entidad el año pasado en toda la diócesis eran extranjeras, habiéndose incrementado este porcentaje en ocho puntos en el último año.

Asimismo, la entidad cuenta con cinco viviendas para personas migrantes en situación de vulnerabilidad, cuatro para varones y una para mujeres, en las que, en 2019 se alojaron 45 personas procedentes de Costa de Marfil, Mali, Nigeria y Senegal, mayoritariamente.

Además, durante el pasado ejercicio, Cáritas gestionó en la diócesis de Valencia 38 viviendas, de las cuales ocho son propiedad de la entidad y el resto son cesiones gratuitas. En ellas, se alojaron 144 personas miembros de familias en situación de vulnerabilidad. De ellas, el 51 por ciento eran personas migrantes. El programa de Intervención social en viviendas atiende a familias de veinte nacionalidades, procedentes de América Latina, África, Europa del Este y Oriente Medio.

Del mismo modo, más del 60 por ciento de los menores de edad atendidos por la entidad son de origen extranjero o sus familias lo son, aunque muchos de ellos han nacido en España.

En el marco de la movilidad humana forzosa, Cáritas Valencia ha seguido atendiendo a familias migrantes en riesgo social y solicitantes de protección internacional cuando agotan o quedan fuera del sistema de acogida oficial y se encuentran en situación de especial vulnerabilidad.

La Iglesia celebra, este próximo domingo la Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado. En su mensaje para este día, el papa Francisco asegura que: «la pandemia nos ha recordado que todos estamos en el mismo barco. Darnos cuenta que tenemos las mismas preocupaciones y temores comunes, nos ha demostrado, una vez más, que nadie se salva solo. Para crecer realmente, debemos crecer juntos, compartiendo lo que tenemos».

En su mensaje, el papa recuerda los cuatro verbos que ya utilizó en el de 2018: acoger, proteger, promover e integrar, a los que añade «ahora otras seis parejas de verbos, que se corresponden a acciones muy concretas, vinculadas entre sí», y que son: conocer para comprender, hacerse prójimo para servir, escuchar para reconciliarse, compartir para crecer, involucrar para promover y colaborar para construir.

Asimismo, el papa nos invita a «motivar espacios donde todos puedan sentirse convocados y permitir nuevas formas de hospitalidad, de fraternidad y de solidaridad».

El director de Cáritas Valencia, Ignacio Grande, ha destacado la importancia de estos verbos en el trabajo que la entidad realiza, ya que «en Cáritas trabajamos cada día para acoger, proteger, promover e integrar a las personas migrantes y refugiadas en cada uno de nuestros programas y acciones. Todas las personas que formamos Cáritas Diocesana estamos involucradas en esta gran tarea».