El mes de mayo es el mes por excelencia dedicado a la Virgen María en todas partes, y de manera muy especial en la Diócesis de Segorbe-Castellón, que rinde especial homenaje a la Virgen de Lledó, en la Archidiócesis de Valencia, a la Virgen de los Desamparados, patrona principal de la ciudad e histórico Reino de Valencia. En Castellón la fiesta es el primer domingo de mayo y en Valencia el segundo domingo. Ambas celebraciones son el gran motor pastoral de la vida religiosa en ambos territorios.

El Obispado de Castellón ha comunicado oficialmente que la Fiesta litúrgica de la Mare de Déu del Lledó no se suspende ni se traslada de fecha. Se celebrará litúrgicamente en la Ciudad de Castellón de la Plana –se trata de una fiesta local- el día establecido en el calendario litúrgico diocesano, aprobado por la Santa Sede. El domingo 3 de mayo el propio Obispo de Segorbe-Castellón, Casimiro López, ha dicho que celebrará Misa a las 11 de la mañana en el Santuario-Basílica de Lledó a las 11:00 de la mañana, a puerta cerrada para los fieles, que será retransmitida por las televisiones locales.

El prelado ha invitado a todos “en estos momentos de prueba y de tribulación hemos de reforzar nuestra oración a Dios, que es providente, compasivo y misericordioso, así como nuestra plegaria a la Virgen, Madre del Señor Resucitado y Madre nuestra, para que pronto nos veamos libres de esta pandemia. Dispongámonos para celebrar este año la Fiesta de la Mare de Déu con más intensidad y mayor devoción, si cabe. Podemos hacerlo celebrando el triduo previo desde casa, solos o en familia, siguiendo los materiales que la Real Cofradía del Lledó va a ofrecer telemáticamente o aquellos que tengamos a disposición.”

Virgen de los Desamparados

 Por su parte, el Arzobispado de Valencia ha decidido el aplazamiento de la celebración de la fiesta de la Virgen de los Desamparados siguiendo las medidas excepcionales por la permanencia de la situación de alarma que impide la concentración de personas. Precisamente, las fiestas de la Virgen son muy populosas congregan miles de personas no sólo de la ciudad, sino de pueblos de la región que acuden en torno al segundo domingo de mayo a festejarla.

El obispo auxiliar Arturo Ros ha informado de esta decisión al Ayuntamiento de Valencia, que implica todas las celebraciones y actos públicos que supongan la congregación multitudinaria de fieles: la Salve solemnísima, Misa de Descoberta, Misa d´Infants, traslado, Misa pontifical en la Catedral, procesión y besamanos. Especialmente tumultuoso es el Traslado de la Virgen en la mañana de su fiesta desde su Real Basílica hasta la Catedral, apenas 200 metros de distancia que tarda en recorrer una hora por la multitud que se agolpa en el recorrido. Esta comunicación se debe a que desde hace siglo, la fiesta de la Virgen es fiesta que costea el Ayuntamiento íntegramente, por lo que se considera fiesta municipal, que todos los años organizan conjuntamente Cabildo dela Catedral y Ayuntamiento. Arturo Ros ha manifestado que “la Archidiócesis de Valencia está colaborando en todas sus acciones de atención social y caritativa a los más desfavorecidos, con los capellanes en los hospitales, la acción en las residencias de mayores, en los centros de menores en situación de vulnerabilidad, los centros de acogimiento para personas sin recursos a través de Cáritas y en la Ciudad de la Esperanza, y queremos que nuestra colaboración se extienda también a velar por todos, evitando la expansión de la pandemia en la previsible concentración de fieles que conllevaría la celebración de la festividad de la Virgen de los Desamparados.

Aunque no se ha dicho de manera explícita, es de imaginar, que al igual que Castellón, en su jornada a puerta cerrada, se mantengan los actos litúrgicos y acostumbrados, tanto en la Basílica de la Virgen como en la Catedral y sean televisados. El prelado ha sí ha manifestado que “sólo y cuando fuera posible, respetando siempre las indicaciones, como hasta ahora, sería nuestra voluntad que la imagen peregrina de nuestra Patrona fuera llevada en su Mare-móvil, con la colaboración de los Seguidores de la Virgen, para el traslado por diferentes barrios de la ciudad de Valencia, acudiendo concretamente a los hospitales y zonas donde más se ha sufrido las consecuencias de la pandemia. No obstante, es un deseo expresado, y que dependerá de la autorización de las autoridades gubernativas”. 

Cabe añadir que en tiempos de grandes catástrofes, calamidades y epidemias, desde el siglo XV hasta la actualidad, la imagen de la Virgen de los Desamparados ha salido por las calles de la ciudad en procesión de rogativas para que protegiera y salvara a sus habitantes.