El Obispado ha firmado un convenio con la entidad cultural hasta 2021 Un centenar de obras de Sorolla estrenan el Palacio Episcopal de Málaga como sede de exposiciones de la Fundación Cultural Unicaja
Fundación Unicaja estrena con esta exposición su gestión del Palacio Episcopal, rebautizado ahora como Centro Cultural Fundación Unicaja de Málaga, en virtud del acuerdo con el Obispado hasta diciembre de 2021.
| Baltasar Bueno, enviado especial a Málaga
Uno aterriza en el abigarrado aeropuerto de Málaga y se encuentra de frente con llamativo y sugerente eslogan turístico que le dispara todas las alertas culturales: “Málaga, Ciudad de Museos”. Nada que ver con los topes folklóricos al uso de Andalucía, y menos de Sevilla. Málaga conserva el señorío cultural desde los romanos, tienen destapado su Teatro Romano con su centro de interpretación a los pies de la Alcazába. Y Para colmo a Picasso o a Pedro de Mena. Lo de Máaga no son los tablaos flamencos, por fortuna, sino cultura e historia pura y dura. Un lugar donde perderse en un fin de semana intensivo cultural.
Junto a su Catedral, impresionante, hay un hermoso edificio tardo-barroco, de mediados del XVIII, el Palacio Episcopal, en la Plaza del Obispo, al que Unicaja con buen ojo clínico ha fichado, de momento temporalmente, para ser su gran y solemne escaparate cultural en el centro de Málaga.
El titular de la Diócesis de Málaga es valenciano, Jesús Catalá, de Vilamarxant, intelectual y pastor a la vez, de fino equilibrio, diplomático curtido en los saberes vaticanos, discreto y trabajador, y ha trabajado siempre muy bien con los mundos culturales. Su nuevo proyecto con Unicaja lo ha empezado con la mejor manera, la muestra pictórica de un paisano suyo, Sorolla.
‘Sorolla tierra adentro’ es el título de la exposición de 111 obras Joaquín Sorolla, que se exhibe en el Palacio Episcopal de Málaga, convertido en Centro Cultural Fundación Unicaja, que estará abierta hasta el próximo 30 de enero, donde se contempla esa faceta menos transitada de la producción del artista: la que tiene que ver con sus paisajes y personajes alejados de la orilla del mar.
Fundación Unicaja estrena con esta exposición su gestión del Palacio Episcopal, rebautizado ahora como Centro Cultural Fundación Unicaja de Málaga, en virtud del acuerdo con el Obispado hasta diciembre de 2021. La muestra, en colaboración con el Museo Sorolla de Madrid y la Fundación Museo Sorolla, puede visitarse hasta el próximo 30 de enero de 2020, en horario de lunes a viernes de 10.00 a 20.00 horas; y los sábados, domingos y festivos, de 9.00 a 14.00 horas.
En la muestra se plasma la diversidad del paisaje español, así como escenas costumbristas de nuestro país. La exposición conecta estos paisajes realistas repletos de luz con escenas mediterráneas y ciudades históricas como Granada, Sevilla o Toledo, diseñándose un recorrido expositivo que lleva al visitante desde el mar, tan habitual en la obra de Sorolla, a los retratos de la naturaleza asturiana y vasca, de la vendimia jerezana o escenas paisajísticas de diversos rincones del país, con una paleta rica en matices.
Desde el mar, la playa y sus paisajes, que abren el recorrido, pasando por la Valencia natal del autor, donde Sorolla da cuenta de un magistral manejo de la luz. Experimenta el artista con la pintura al aire libre, realista, que se agrupa en un conjunto de pinturas de paisajes de Castilla, para viajar en la siguiente sala al norte del país, hasta el Cantábrico. Entre las obras se puede ver modelos murales encargados por la Hispanic Society de Nueva York para decorar su biblioteca.
'La fuente de Buñol' (1890), 'Campo de azucenas' (1895, 'Patio de San Juan de la Cartuja de Porta Coeli' (1896), 'Puente Real, Valencia' (1908), 'Tipos de Gipúzcoa' (1912), 'Paisaje de San Sebastián' (1911), 'Tormenta sobre Peñalosa' (1906), 'El baño de la reina' (1907), 'Vendimiando' (1914), 'Tipos segovianos', 'Tipos del Valle de Ansó', 'Tipos de Lagartera' (1912)… También, nueve potentes lienzos, preparatorios para los murales de la Hispanic Society donde Sorolla disecciona el imaginario español a través de sus tipos populares.
Precisamente en su periplo regionalista por las tierras de España hay estudiosos que ven ahí cómo Sorolla fue desgranando su perfil republicano y liberal. En tierras andaluzas Sorolla en contacto con la Institución Libre de Enseñanza de los malagueños Francisco Giner de los Ríos y Alberto Jiménez Fraud.
El convenio Unicaja-Obispado
El convenio de la Fundación Unicaja y el Obispado de Málaga supone un préstamo del Palacio Episcopal hasta diciembre de 2021. En este tiempo el que el Obispado cede el edificio para para que la Fundación lo adecúe a sus actuales necesidades expositivas y culturales, destinadas a impulsar sus actuaciones propias y en colaboración, así como a proseguir con la promoción de las artes y la cultura. La Fundación Unicaja tiene previsto poner en marcha un programa de exposiciones de artistas de primer nivel, muestras de arte sacro o exposiciones con fondos de los Certámenes Unicaja de Artes Plásticas.
El Palacio Episcopal de Málaga está declarado Bien de Interés Cultural (BIC) por la Junta de Andalucía. Fue levantado junto a la catedral, en la céntrica Plaza del Obispo por el arquitecto maestro mayor de la catedral, Antonio Ramos, que fue el encargado de idear, dar forma y arrancar la construcción, a petición del obispo José Franquis Lasso. Su edificación arrancó a mediados del siglo XVIII, sobre dos palacios ya existentes del siglo XVI.
Del Palacio Episcopal destaca la impresionante composición de su fachada principal, que complementa perfectamente a la catedral, de la que separan escasos metros. La fachada de tres plantas se articula a través de pilastras pareadas entre las que se disponen balcones en las plantas superiores y ventanas en la baja. Los frontones rectos y curvos de los huecos superiores sobresalen en su portada-retablo, rematada con una hornacina con una Virgen de las Angustias, obra del escultor Fernando Ortiz. Con tres cuerpos de altura, se combinan mármoles en colores gris en el fondo y rosa para las columnas, que van decreciendo de manera progresiva en cada planta superior.
Joya arquitectónica
La planta baja del palacio está ordenada en torno a un gran patio central. Todo este espacio se construye para ser la zona de administración y se compone de un cuerpo bajo con arquería sobre columnas toscanas. La planta posee ahora una gran sala de exposiciones temporales de 340,22 metros cuadrados, con capacidad para 157 personas.
Mediante dos arcos rebajados, en uno de los laterales, se accede a unas apreciadísimas escaleras de tipo imperial de doble tiro y cubierta de una cúpula elíptica con el fresco «El triunfo de la Eucaristía», una obra anónima del siglo XVIII. En las cuatro fachadas de esta planta se disponen balcones, con un registro de ventanas superiores. En el interior conviven otras tres salas de exposiciones junto a una capilla.
El jardín del palacio, construido en la última parte del siglo XVIII, y llevado a cabo por José Martín de Aldehuela, arquitecto que se hizo cargo de las obras tras la muerte de Antonio Ramos, es uno de los secretos del complejo, que se abrió al público en 2014.