La "diplomacia del arte" se hace concreta Los Museos Vaticanos llegan mañana a la "ciudad prohibida" de Beijing
"La belleza nos une: Arte chino de los Museos Vaticanos" es el nombre de la muestra que se inaugurará mañana en la capital del gigante asiático en otro paso más del acercamiento guiado por el papa Francisco
Hernán Reyes Alcaide, corresponsal en el Vaticano
El Vaticano expondrá desde mañana una serie de obras de sus museos en la Ciudad Prohibida de Beijing a través de la exposición denominada "La belleza nos une", que incluirá una serie de objetos chinos atesorados en los museos de la Santa Sede y que por primera vez llegarán a su país de origen.
En un paso más del acercamiento entre la Santa Sede y China bajo el pontificado de Francisco, la muestra, que permanecerá hasta el 14 de julio, incluye 76 obras creadas en su mayoría durante la dinastía Han (206 a.C. - 8 d. C.), y está dirigida por el padre Nicola Mapelli, responsable del departamento Anima Mundi de los Museos Vaticanos; y por el artista Wang Yuegong.
Acercar a los dos Estados
La llegada de los Museos Vaticanos a Beijing había sido anunciada en noviembre de 2017 pero sin fecha, luego de que la presencia de un artista chino en la residencia papal de Castelgandolfo ese mismo año hubiera dado inicio a o que se denominó "la diplomacia del arte" para acercar a los dos Estados.
En medio de sus guiños a China, Francisco se convirtió en 2014 en el primer Papa de la historia en sobrevolar el espacio aéreo del gigante asiático, pese a más de 50 años de existencia de la República Popular sin relaciones diplomáticas con Roma.
Según informó hoy el Vaticano en un comunicado conjunto con el "Palace Museum" de Beijing, la confirmación se da días después de que el Vaticano inaugurara un pabellón de casi 200 metros en la Expo Beijing 2019 dedicada a la Horticultura, un nuevo paso de cercanía entre los dos Estados, que no tienen relaciones bilaterales.
Acuerdo conjunto
La presencia en la Expo sobre horticultura y la llegada a la mítica Ciudad Prohibida son los primeros dos pasos concretos que se dan después de la firma, en septiembre pasado, de un acuerdo conjunto para la designación de obispos que regularizó la situación de la Iglesia en China después de más de cincuenta años.
Además, está previsto que para el día nacional del Vaticano, el 14 de septiembre, el pabellón albergue un seminario sobre desarrollo en China que significaría un nuevo acercamiento bilateral.