La capital del Baix Camp presenta los actos que se celebrarán hasta este próximo sábado La Noche de las Religiones, en Reus: "El diálogo entre confesiones es importante para nuestra salud democrática"

(FLAMA).- La producción del aguardiente en Reus, durante el siglo XVIII, propició la expresión "Reus-París-Londres" para referirse a los tres exponentes de este licor en el mundo, pero, este pasado jueves, a estas tres ciudades se añadió una cuarta, la de Berlín. Allí nació la idea que ha llevado a la AsociaciónUNESCO para el Diálogo Interreligioso (Audir) a organizar un evento como La Noche de las Religiones, consolidado en varias ciudades, pero que se estrenaba en Reus en un acto de apertura en el que su codirector, Arnau Oliveres, remarcaba, precisamente, llegar a capitales de comarca como ésta, donde la presencia de un "microcosmos" de religiones obliga a mover ficha. En este caso, desde el interior de un antiguo lavadero, en el Casal de las Mujeres de Reus, donde otro líquido —el agua— fue relevante durante el siglo pasado.

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Así, se iniciaba un programa que, con un formato de macedonia antropológica como los que han arraigado en otras localidades, concluirá este sábado. "Cada tarde habrá actividades encaminadas a abrir las puertas de cada una de las once comunidades religiosas y entidades espirituales hasta la noche del clásico futbolístico entre el Barça y el Real Madrid, que sería otro tipo de religión", decía Oliveres, quien compartía parlamentos con Neus Forcano, directora de Justícia i Pau, y Ramon Bassas, director general de Asuntos Religiosos de la Generalitat de Catalunya; una institución, ésta, organizadora de esta primera edición de la propuesta interreligiosa junto con el Área de Servicios a las Personas y Derechos Sociales del consistorio reusense.

"Cada tarde habrá actividades encaminadas a abrir las puertas de cada una de las once comunidades religiosas y entidades espirituales hasta la noche del clásico futbolístico entre el Barça y el Real Madrid, que sería otro tipo de religión"

"Que un ayuntamiento acepte coorganizar una propuesta como esta, pudiendo hacer caso omiso fácilmente y sin necesidad de dar respuestas, dice mucho, también, de la actitud de éste y de otros consistorios de nuestro territorio", reconocía después Bassas , que centraba su discurso en la necesidad de hacer valer el diálogo entre personas de diversas confesiones. "Ya no es una cuestión secundaria, ya que de ella depende la salud social y democrática que tengamos", admitía. "No vale —seguía el mataronense— recordar la religión sólo por Santa Bárbara, cuando se tocan las campanas para alejar la lluvia".

Este lavadero, donde el agua se convirtió en la protagonista hace décadas y fue, para Bassas, "parte de la vida de todo el mundo, pero sobre todo de las mujeres, que venían a limpiar la ropa de manera marginal, pero, al mismo tiempo, libre", permitía a los ponentes referirse, sobre todo, a la necesidad de seguir feminizando las religiones, tal y como lo hacía, por ejemplo, Neus Forcano: "La voz de las mujeres —aseguraba— , transmisora también de elementos atribuidos a la religión, debe ser reivindicada de nuevo, y aquí es un buen lugar para hacerlo".

El acto acababa de noche, casi con la misma oscuridad, en la calle, con la que había empezado. Pero la noche de Reus, este jueves, era también una oportunidad para captar que "ni es el momento del próximo día después de lo importante ni puede privarnos de seguir viendo el brillo que nos rodea", en palabras de Forcano. "Para ver cómo aparece el amanecer en el horizonte primero hay que haber pasado por la noche", señalaba la directora de Justícia i Pau.