"Desde su llegada a la diócesis, su gestión ha estado marcada por conflictos" "La relación de Rafael Zornoza con la trimilenaria Medina Sidonia ha sido perjudicial, calamitosa, desastrosa y funesta"
En Medina la nefasta gestión del Obispado ha provocado la desaparición o el deterioro del patrimonio eclesiástico de gran valor histórico y cultural
Piden el inmediato relevo del actual obispo de la Diócesis de Cádiz Ceuta, Rafael Zornoza, una vez que ha cumplido los 75 años de edad necesarios para la jubilación de los ordinarios
| Antonio Jose Candon Herrera
Un buen número de Comunidades religiosas cristianas de la localidad, con más o menos profusión (no lo hacen público antes el temor de posibles represalias) así como ciudadanos en general creyentes o no: ateos, agnósticos, irreligiosos de Medina Sidonia, han mostrado su total y absoluto acuerdo con el Grupo cristiano de Reflexión-Acción de la Bahía de Cádiz, quienes a través de un comunicado, hecho público, piden el inmediato relevo del Obispo de la Diócesis de Cádiz-Ceuta, Rafael Zornoza, una vez que ha cumplido los 75 años de edad, periodo establecido por la Santa Sede, para la jubilación de los prelados u ordinarios.
Los medios de comunicación se han eco de la solicitud del urgente relevo, entre ellos, portaldecadiz.com, quien publico una información que titularon "Un empresario inmobiliario antes que un obispo": Cristianos de Cádiz piden un nuevo obispo "lo más pronto posible".
Prácticamente desde que fue nombrado por el Papa, el máximo responsable de la Diócesis gaditana, la relación de Rafael Zornoza con la trimilenaria Medina Sidonia ha sido perjudicial, calamitosa, desastrosa, funesta, entre otros calificativos.
Sirva como ejemplo a modo de resumen, nada más tomar cargo de su posesión, mandó cerrar al culto la Iglesia de la Victoria, situada en la céntrica plaza de la Cruz, en el centro de la ciudad y en mismo corazón del conjunto histórico artístico monumental, donde a lo largo de su prelatura, se produjeron no pocos desprendimientos de piedras, ladrillos, tierra, azulejos, haciendo caso omiso por otra parte, a los distintos expediente urbanísticos del Ayuntamiento, para la limpieza y embellecimiento de la torre o fachadas.
Al margen del daño estético del templo, hay que destacar el estado ruinoso de su interior, donde se vio obligado a actuar en las cubiertas de una de sus naves, ya que, desde un muro medianero, filtraban agua, humedad y suciedad a una vivienda anexa. Otra de las naves fue reparada parcialmente por una de la Hermandades que tenía su sede social en esta iglesia; y la nave central, interior de la torre, coro, altar principal o laterales, ante sacristía, sacristía, patios y otras dependencias, actualmente están estado semiruinoso.
Por otra parte, la despreocupación o desinterés por el patrimonio histórico religioso, permitió la ruina total y derrumbe de la Ermita de Santa Ana.
Parecidas circunstancias se han dado en la Ermita de los Santos Mártires, el templo cristiano más antiguo de Andalucía, la cual tiene en el más absoluto de los abandonos y con peligro de que corriera la misma suerte que Santa Ana.
Pero lo curioso es que el Obispado gaditano presentó un proyecto por valor de 3 millones de euros en el Ayuntamiento asidonense, para convertir los Santos Mártires y propiedades anexa en una casa de descanso y acogimiento para sacerdotes.
Continuando con los despropósitos de Rafael Zornoza, cabe destacar los robos de tallas, cuadros y campanas en esta última Ermita, así como diversas esculturas o cuadros y objetos en el principal monumento religioso de Medina Sidonia, la Iglesia de Santa María la Coronada, actualmente igualmente, en un lamentable estado de abandono, y donde se vio obligado a enjaular con andamios la torre y cúpula (esta sigue con el andamiaje) debido a desprendimientos de piedras, tierra, polvo, ladrillos, el estado ruinoso de la escalera de caracol por la que se sube a las denominadas salas altas, campanas, interior y exterior de la cúpula, entre otros desperfectos.
También conviene destacar los desatinos y barbaridades cometidas con los inmuebles que en su día fueron donados por fieles en herencia a la Patrona de la Virgen de la Paz, los cuales se han apropiados con el objeto de especular con ellos. Había que preguntarse, igualmente por las tierras y propiedades que también fueron legadas por testamentos para cultos a la Virgen o conservación del propio templo.
Del mismo modo cierto es que la Ermita del Cristo de la Sangre no es propiedad de la Iglesia, pero también se le recrimina al Obispo de Cádiz, no haber intentado o al menos, mostrar el mínimo interés, para salvar la propia ermita y cuantos elementos religiosos de gran valor histórico que han sido objeto de expolios y robos.
Si a esto unimos el espantoso ridículo del “falso cura”venezolano u otros sacerdotes que abandonaron o se marcharon de las iglesias de Medina a otros destinos fuera de la Diócesis de Cádiz en desacuerdo con la gestión del Obispo y quienes les asesoran.
Estos son solo algunos, hay más, de las incongruencias o desinterés de Monseñor por el patrimonio histórico, artístico y monumental de propiedad eclesiástica de Medina.
Se dice que los obispos son una figura integral en la iglesia católica con un papel fundamental en la organización y guía de la comunidad de fieles y de toma de decisiones importantes sobre la doctrina y las prácticas de su diócesis, además de administrar y dirigir los sacramentos, también tiene la autoridad para ordenar sacerdotes y diáconos, y para tomar decisiones importantes sobre la doctrina y las prácticas de su diócesis. ¿No es el caso del encabezamiento de esta “articulo”?. Son otras cuestiones que debe o atañe único y exclusivamente a los fieles o creyentes.