La diócesis acusa al sacerdote de haber actuado "contra la ley divina y la canónica" La defensa de Rafael Vez presenta escrito de recusación “por irregularidades” contra la demanda del obispado de Cádiz de “suspensión temporal del ministerio sacerdotal”
También le acusa de “difamar” al ex ecónomo diocesano, Antonio Diufaín, con “insidias, injurias y calumnias vertidas en diversos medios de comunicación”
Rafael Rabasco, solicita al Tribunal eclesiástico del Obispado de Cádiz y Ceuta “la privación perpetua de los oficios de profesor del seminario y canónigo de la Catedral"
Se solicita, además, la pública retractación del sacerdote “con el deber de reparación pública y petición de perdón por el daño ocasionado”
Se solicita, además, la pública retractación del sacerdote “con el deber de reparación pública y petición de perdón por el daño ocasionado”
La defensa del sacerdote Rafael Vez, acaba de enviar al obispado un escrito de recusación “por irregularidades”, en el que recusa a Rafael Rabasco, promotor de Justicia, y al propio Tribunal eclesiástico de Cádiz, en la demanda canónica interpuesta por la diócesis contra el cura.
A Rafael Rabasco se le recusa por haber actuado ya en todo este litigio por delegación del obispo, lo cual le inhabilita para poder ser promotor de Justicia de la diócesis en este caso. Y la defensa de Rafael Vez también recusa al Tribunal de la diócesis, porque ha sido nombrado por el propio obispo y, por lo tanto, se correría el riesgo de que fuese parcial. Lo lógico es que el caso se juzgue en el tribunal interdiocesano de Sevilla o en el de la Rota de Madrid.
Y es que, haciendo caso omiso a las advertencia de Roma, a través de la Congregación del Clero, que pide al obispo y al sacerdote que dialoguen y zanjen el contencioso por las buenas, monseñor Zornoza sigue aferrado a la vía judicial canónica. Más aún, eleva el pistón del desencuentro con un escrito acusatorio durísimo, firmado por su promotor de Justicia.
En la demanda de la diócesis de Cádiz, a la que ha tenido acceso RD, se acusa al cura Vez Palomino de haber actuado contra La ley Divina (contra el respeto y dignidad de las persona y por causa de escándalo y de falsos testimonios y mentiras) y contra la Ley Canónica (por crimen de falsedad, por desobediencia a la autoridad eclesiástica, por impedir o condicionar la libertad y ejercicio de la potestad o ministerio y por suscitar aversión u odio en los súbditos contra el ordinario e inducirles a la desobediencia).
También le acusa de “difamar” al ex ecónomo diocesano, Antonio Diufaín, con “insidias, injurias y calumnias vertidas en diversos medios de comunicación”. Y, de hecho, la denuncia canónica elenca toda una larga serie de opiniones de Rafael Vez en las redes sociales y su repercusión en los medios de comunicación, entre ellos en Religion Digital.
Por todo ello, Rafael Rabasco, solicita al Tribunal eclesiástico del Obispado de Cádiz y Ceuta “la privación perpetua de los oficios de profesor del seminario y canónigo de la Catedral y la suspensión temporal del ministerio sacerdotal durante el tiempo de la condena” para Rafael Vez Palomino.
Asimismo, se solicita “la retirada ipso facto de sus páginas personales de internet (facebook, twitter..) y del de la Parroquia de Santa Catalina de Alejandría, de todos los comentarios y noticias contra el Sr. Obispo, sus próximos colaboradores y las decisiones de gobierno de la propia diócesis”. Se solicita, además, la pública retractación del sacerdote “con el deber de reparación pública y petición de perdón por el daño ocasionado”. ¡Como en la época de Torquemada!