Anteojos, trajes protectores, máscaras y material necesario para el cuidado y el tratamiento de los infectados por el coronavirus han llegado al Hospital “Regina Apostolorum” de las Religiosas Hijas de San Pablo, en la localidad italiana de Albano Laziale, recientemente convertido en un Centro para enfermos de Covid-19.
Los materiales fueron donados por el Papa Francisco y enviados al Obispo de la ciudad, Monseñor Marcello Semeraro.
El Papa envió al mismo Prelado un respirador para la atención de los pacientes en cuidados intensivos de la misma estructura. El Pontífice "quiso significar a la Dirección, a todo el personal y en particular a los que sufren la enfermedad, que está cerca de cada uno de ellos con la oración e imparte de corazón Su Bendición Apostólica, como signo de la deseada ayuda y consuelo celestial", se lee en la carta enviada por la Limosnería Apostólica.
Al expresar al Papa, su gratitud y la de todo el Hospital, el Obispo de Albano también agradeció al Cardenal Konrad Krajewski, quien se hizo intermediario de la donación del Papa Francisco.