El Defensor del Pueblo ha atendido a 400 supervivientes de abusos en España Ángel Gabilondo: un año de trabajo con las víctimas, sin lograr concretar la colaboración de la Iglesia

Un año después de que se le encargara investigar los abusos a menores en la Iglesia, el Defensor del Pueblo aún espera cómo se concretará la colaboración de esa institución y confía en que las numerosas reuniones mantenidas durante estos meses den pronto sus frutos.

En los últimos meses se han celebrado reuniones con representantes de la Conferencia Episcopal Española (CEE) y de congregaciones religiosas y fuentes del Defensor del Pueblo han señalado a EFE que confían en que fructifiquen y se pueda concretar la colaboración de la Iglesia.

Los obispos descartaron desde un principio participar en la comisión del Defensor, aunque se mostraron dispuestos a colaborar en lo que se les requiriera, pero esa colaboración no se ha concretado aún en nada.

De hecho, el pasado 16 de febrero, el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, lamentó la "escasísima información" recibida de las diócesis después de abrir un expediente de coordinación para hacer un seguimiento de los casos no prescritos en todo el territorio nacional.

La Fiscalía -que también participa en la comisión de expertos creada por el Defensor- se dirigió a cada una de las setenta diócesis, recordándoles su obligación legal de poner en conocimiento del Ministerio Público cualquier hecho que pudiera constituir un delito contra la libertad sexual de un menor de edad.

Pero sólo contestaron 29 y con "respuesta de modelo", la mayoría afirmando no tener abiertos casos en procesos canónicos o remitiéndose a lo ya enviado a las fiscalías provinciales.

La investigación del Defensor tardó en arrancar y no fue hasta el 5 de julio -casi 4 meses después de que se produjera en encargo del Parlamento- cuando se constituyó la comisión asesora, la encargada de elaborar un informe sobre los abusos sexuales en el ámbito de la Iglesia y el papel de los poderes públicos.

Durante su comparecencia en la Comisión Mixta de Relaciones con el Defensor del Pueblo el mes pasado, Gabilondo mostró su intención de tener listo el informe antes de que concluya la legislatura.

La comisión, formada por 20 personas con experiencia en atención a víctimas, conocimientos en el ámbito jurídico, en el de los derechos humanos, en victimología o en la docencia, tiene el objetivo de "determinar hechos y responsabilidades, proponer procedimientos de reparación a las víctimas e impulsar medidas de prevención y protocolos de actuación para evitar que esto pueda volver a suceder".

Junto a la comisión asesora, el Defensor creó un Foro de Asociaciones -donde los representantes de las asociaciones de víctimas que lo deseen aportarán su experiencia y posiciones a través de diferentes sesiones de trabajo- y una Unidad de Atención a las Víctimas.

Esta última comenzó a recibir los testimonios de las víctimas un día después, el 6 de julio, y desde entonces ha atendido unos 400 casos a través de los distintos canales habilitados por la oficina del defensor y también en los desplazamientos que los expertos han llevado a cabo en distintas ciudades.

Esta Unidad, centrada en atender y escuchar a quienes acudan a exponer su testimonio, está formada por profesionales con una amplia experiencia en la investigación de los abusos en la Iglesia y el acompañamiento a los afectados.

Entre ellos se encuentran expertos como el coordinador del Proyecto Repara de la Archidiócesis de Madrid, Miguel García-Baró López; Juan Carlos González Martín, miembro de Eshma, organización para el acompañamiento a supervivientes de abusos sexuales; o Paula Merelo Romojaro, autora del libro Adultos vulnerados en la Iglesia, entre otros.