El cardenal de Madrid 'bendice' en un desayuno el relanzamiento de la Academia de Líderes Católicos Cobo apuesta por la "buena política" frente a los tiempos de "confrontación y descarte"

Cobo, durante el desayuno
Cobo, durante el desayuno

"Necesitamos espacios de encuentro, buscando la unidad, que quiere ser respetuosa ante la diversidad. Una unidad que quiere establecer vínculos efectivos, en estos momentos en que es fácil caer en la confrontación y el descarte"

"Quería proponer y lanzar crear espacios colaborativos, imprescindibles para un trabajo más sinodal, que nos saque de nuestros espacios"

"Frente a una cultura que favorece la confrontación, apostamos por las relaciones, incluidas con aquellos que no piensan como nosotros"

"Necesitamos espacios de encuentro, buscando la unidad, que quiere ser respetuosa ante la diversidad. Una unidad que quiere establecer vínculos efectivos, en estos momentos en que es fácil caer en la confrontación y el descarte". El cardenal de Madrid, José Cobo, abrió las puertas del Seminario de Madrid para el relanzamiento de la Academia de Líderes Católicos, en un desayuno de esos en los que caben "todos, todos, todos", desde el cura de La Cañada al rector de la Francisco de Vitoria, y políticos de todo signos.

‘Informe RD’ con análisis y el Documento Final del Sínodo

Esta es una apuesta por la "buena política", subrayó el cardenal de Madrid en su brindis inicial, clamando por la necesida de "espacios imprescindibles para la convivencia, y para que la buena noticia sea creíble y amable".

Cobo, durante su intervención
Cobo, durante su intervención

"Quería proponer y lanzar crear espacios colaborativos, imprescindibles para un trabajo más sinodal, que nos saque de nuestros espacios", desde la preguntas lanzadas por el Papa Francisco: "¿Se puede creer aún en lap osibilidad de un mundo más nuevo y fraterno?". Se puede, aunque, "tenemos tarea". 

"La Iglesia está llamada a ofrecer caminos de encuentro y fraternidad, para que en nuestro mundo no olvidemos que estamos llamados a la consecución del bien común", incidió Cobo, invitando a medios, universidades, líderes políticos y sociales, a este proyecto. "La Iglesia de Madrid apuesta por una Iglesia sinodal de comunión, participación y misión", recalcó el purpurado, pidiendo que "aunque tardemos más, nos acostumbremos a trabajar colegialmente".

Algunos de los participantes del desayuno
Algunos de los participantes del desayuno

Sinodalidad frente a la "gran desvinculación"

Frente a la "gran desvinculación" de la que habla el último informe Foessa, Cobo admitió que "estamos des-religados porque Dios resulta prescindible", lo cual provoca un desarraigo "que nos hace huérfanos y sin raices". "Frente a una cultura que favorece la confrontación, apostamos por las relaciones, incluidas con aquellos que no piensan como nosotros", clamó Cobo.

"Frente a la desvinculación queremos generar espacios de sincera fraternidad. Naturalmente, para los creyentes el principio y fundamento de nuestra regeneración de vínculos", añadió, ofreciendo "pisata y análisis" para "acoger juntos una ética que nos acompañe , que sea foro de consenso y de la amistad política por la que tanto apuesta el papa Francisco".

"La Iglesia no quiere quitar el protagonismo a nadie, ni queremos apropiarnos de espacios que no son nuestros. Pero si podemos apoyar las iniciativas para que tengan fuerza multiplicadora"

"La Iglesia no quiere quitar el protagonismo a nadie, ni queremos apropiarnos de espacios que no son nuestros. Pero si podemos apoyar las iniciativas para que tengan fuerza multiplicadora", aclaró Cobo, quien incidió en que "la Iglesia de Madrid quiere aportar un granito de arena a la necesidad de lo que el Papa Francisco viene llamando 'buena política' y que pasa por la necesidad de revertir la desafección y un peligroso escepticismo hacia lo público incentivando la participación de los ciudadanos y, sobre todo, buscando implicar a nuestros jóvenes en la construcción de un futuro que les afecta muy directamente".

En este punto, la diócesis de Madrid acogió la presentación de la Academia de Líderes Católicos, comandada por José Antonio Rosas, e iniciada en Madrid por el cardenal Carlos Osoro, que finalmente no pudo acudir al desayuno, y nuevas propuestas de pastoral universitaria, lanzadas por Laura Moreno. 

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