Tras el tiroteo de ayer y el aumento de tensión Gran despliegue policial israelí en Jerusalén por el rezo del viernes de Ramadán

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Hoy se realizan las oraciones del primer viernes del mes sagrado musulmán de Ramadán y se espera gran cantidad de fieles entre las murallas de la Ciudad Vieja de Jerusalén, en su parte oriental ocupada

La Policía israelí ha realizado un amplio despliegue en Jerusalén ante la asistencia de decenas de miles de palestinos que hoy van a rezar a la Explanada de las Mezquitas por el primer viernes de Ramadán, que coincide con un nuevo repunte de tensión en la región tras un nuevo ataque anoche en Tel Aviv.

Israel permitió esta semana que mujeres de todas las edades, hombres de más de 50 años y niños de hasta 12 años del territorio palestino ocupado de Cisjordania puedan visitar Jerusalén. Hoy se realizan las oraciones del primer viernes del mes sagrado musulmán de Ramadán y se espera gran cantidad de fieles entre las murallas de la Ciudad Vieja de Jerusalén, en su parte oriental ocupada.

Pese al ataque de ayer por parte de un palestino en el centro de Tel Aviv que se saldó con dos muertos y la creciente preocupación de seguridad tras el incidente, el aparato de Defensa israelí decidió proseguir con las medidas anunciadas y no suspendió el acceso de los palestinos a la Ciudad Santa.

Israel se encuentra en estado de alerta máxima tras el tiroteo de ayer, el cuarto ataque en poco más de dos semanas en el país, en lo que sus autoridades califican como una "ola de terrorismo" que se ha saldado ya con la muerte de 13 personas, diez de ellas civiles.

El tiroteo de ayer, perpetrado por un palestino de la ciudad de Jenín, en el norte de Cisjordania, paralizó Tel Aviv después de que el atacante estuviera fugado varias horas hasta ser abatido esta mañana por unidades especiales de la Policía.

El ataque, cometido contra un bar céntrico, sembró el pánico y corredizas por el corazón de la ciudad, en plena ebullición en una noche de jueves previa al fin de semana (en Israel es el viernes y sábado), con miles de jóvenes por la calle y locales del área.

Tras el incidente, más de mil miembros de las fuerzas de seguridad fueron desplegados para peinar calles y casas en búsqueda del atacante, mientras se ordenaba a la población de permanecer encerrada.
Ante la situación, el primer ministro israelí, Naftali Benet, aseguró esta mañana que "Israel no tendrá límites en la guerra contra el terrorismo".

El titular de Defensa, Beny Gantz, advirtió que el aparato de seguridad del país actuará "con mano de hierro" y seguirá "actuando con operaciones de inteligencia y mecanismos ofensivos y defensivos para cortar esta ola de terror".

El atacante no tenía antecedentes previos de arrestos ni estaría vinculado a ninguna milicia o facción política palestina, según fuentes de inteligencia israelíes citadas por medios.

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