El arzobispo de París, Michel Aupetit, confirmó este viernes que ha puesto su cargo a disposición del papa después de que la prensa revelara que mantuvo una relación con una mujer en 2012.
El religioso negó las informaciones publicadas por el semanario Le Point, según las cuales habría tenido un idilio con esa mujer, pero reconoció una "relación ambigua", según la diócesis, lo que le ha llevado a apartarse "para no perjudicar" a la institución.
"No he empleado la palabra dimisión. Eso significaría que abandono mi tarea. En realidad, la devuelvo al Santo Padre, que es quien me la confió", indicó el propio Aupetit al diario católico La Croix.
El Papa tiene ahora la posibilidad de aceptar la denuncia o de rechazarla.