Nicola Eterović reitera las líneas rojas del Vaticano sobre la homosexualidad El nuncio en Alemania también para los pies al Camino Sinodal

Fue el domingo pasado, durante un servicio religioso en la diócesis de Aquisgrán, donde el nuncio en Alemania, Nicola Eterović, participaba en una peregrinación. No dijo el diplomático nada nuevo, ni una sola línea que no forme parte de la tradición de la Iglesia y que no haya reiterado el mismo Vaticano en los últimos tiempos a raíz de las deliberaciones puestas en marcha por el denominado Canino Sinodal alemán.

Porque nada nuevo hay en que Eterović, siguiendo las palabras del Papa, diga que la actitud de “borrar la diferencia entre los sexos” no es saludable, que el matrimonio solo es posible entre un hombre y una mujer o que “la Iglesia católica siempre ha proclamado esta enseñanza en fidelidad al Señor y se ha opuesto tanto a los ataques antiguos como a los nuevos, y se mantuvo firme a favor de la familia, que es la célula primordial de la Iglesia y de la sociedad”.

En la cabeza de Helmut Dieser

La verdaderamente novedoso es el lugar en el que lo dijo: la diócesis que pastorea el obispo Helmut Dieser, quien en reiteradas ocasiones se ha pronunciado en favor de una mayor apertura de la Iglesia a estas cuestiones de moral sexual, describió las asociaciones homosexuales como “queridas por Dios” y dijo en una entrevista que “no había cien por ciento binario” en la asignación personal al género femenino o masculino, por lo que ya no se puede decir que sólo hay dos sexos, según informa Kath.ch

Dieser, uno de los obispos más combativos a la hora de perseguir la pederastia en la Iglesia germana, es también uno de los pastores más partidarios del proceso de reformas puesto en marcha por el Camino Sinodal, algunos de cuyos postulados (precisamente en cuestiones de moral sexual, pero también en la puesta en marcha de un Consejo Sinodal) han sido tajantemente contestados por los cardenales Parolin, Ladaria y Ouellet, con el consentimiento del papa Francisco.

"Lo del nuncio era de esperar"

Por lo tanto, se interpreta que estas palabras del nuncio son, en realidad, un recordatorio para el obispo diocesano. Y él lo sabe, pero no parece afectarle demasiado al ánimo.

“[Las palabras de Eterović] era de esperar. El nuncio representa, y debe representar, la línea oficial romana”, señaló en declaraciones a la agencia KNA el obispo de Aquisgrán. “Pero siempre decimos algunas frases más en algunos lugares. Y ese es el punto de discusión. ¿Es posible ampliar lo que ya existe sin ponerlo en peligro o cuestionarlo?”, se preguntó Helmut Dieser.

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