"Rezo para que aquel pueblo martirizado pueda encontrar paz y estabilidad tras tantos años de guerra y de violencia" El Papa invita a las autoridades de Irak "a escuchar el grito de la población que pide una vida digna y tranquila"

Tras recordar en la audiencia general de los miércoles, que la "misión está desde Pentescotés en manos del Espíritu", el Papa Francisco hizo un llamamiento a la paz y al diálogo en el "martirizado Irak". El Papa invitó a las autoridades del país "a escuchar el grito de la población que pide una vida digna y tranquila" y, con la ayuda de la comunidad internacional "recorrer la vía del diálogo y de la reconciliación".

Lectura del libro de los Apóstoles (16, 9-10)

Algunas frases de la catequesis del Papa

“Leyendo los Hechos de los Apóstoles, se ve como el Espíritu Santo es el protagonista de ña misión de la Iglesia”

“Lo vemos claramente en el momento en que el apóstol Pablo recibe una visión, en la que un macedonio le suplica. 'Ven a Macedonia y ayúdanos'”

“El apóstol no lo duda y parte a Macedonia”

“Tres son los acontecimientos que caracterizan su estancia: 1) La evangelización y el bautismo de Lidia y de su familia; 2) La detención que sufre, junto a Silas, tras haber exorcizado a una esclava explotada por sus amos; 3) La conversión y el bautismo de su carcelero y de su familia”

“Una vez que el corazón está abierto, la persona puede dar hospitalidad a Cristo y a los demás”

“Tenemos aquí el testimonio de la llegada del cristianismo a Europa: el comienzo de un proceso de inculturación que continúa todavía hoy”

“La hospitalidad ofrecida por Lidia a los Apóstoles remite a la gracia de la acogida y del servicio”

“Tras la calurosa acogida en casa de Lidia, Pablo y Silas tienen que vérselas con la dureza de la cárcel. Pasan de la casa a la cárcel”

“También hoy hay gente que paga por adivinaciones y bienaventuras. En mi diócesis, en un parque había más de 60 mesitas, con adivinadores, hechadoras de cartas. La gente cree en esto y paga”

“Como la oración de Pentecostés, también la realizada en la cárcel provoca efectos prodigiosos. Como los tres jóvenes en la fosa ardiente, los apóstoles alaban a Dios y la 'dynamis' del Espíritu abre las cerraduras y las puertas”.

“En el corazón de la noche, el carcelero escucha la palabra del Señor y, junto a su familia, acoge a los apóstoles, les lava las heridas y, junto a los suyos, recibe el Bautismo”

“En el corazón de la noche de este anónimo carcelero, la luz de Cristo brilla y derrota a las tinieblas: las cadenas del corazón caen y surge en él y en sus familiares una alegría jamás antes sentida”

“Así el Espíritu Santo hace la misión. Desde Pentecostés en adelante él es el protagonista d ella misión y nos lleva adelante”

“Pidamos también nosotros hoy al Espíritu Santo un corazón abierto, sensible a Dios y hospital de campaña con los hermanos, como el de Lidia, y una fe audaz, como la de Pablo y Silas, capaz de romper las cadenas, las nuestras y las de los que están a nuestro lado”

Texto íntegro del saludo del Papa en español

Queridos hermanos: El libro de los Hechos de los Apóstoles narra la llegada de Pablo a la ciudad de Filipos, colonia romana de la Macedonia, y por tanto la entrada del Evangelio en Europa. Hay tres acontecimientos que caracterizan este episodio. En primer lugar, el bautismo de Lidia, una mujer creyente a la que el Señor por obra del Espíritu le abrió el corazón para que aceptara la enseñanza de Pablo. Una vez que el corazón de Lidia se abrió, pudo acoger a Cristo mediante el bautismo, junto a toda su familia, y abrió su casa a los demás Apóstoles. Esta hospitalidad de Lidia nos recuerda la acogida y el servicio que caracterizaban a las mujeres que acompañaban a Jesús y a los Apóstoles. Gracias a esta acogida femenina florecieron las domus ecclesiae, las iglesias domésticas, entre los primeros cristianos.

En segundo lugar, Pablo y Silas fueron denunciados por los dueños de una esclava que tenía un espíritu de adivinación y les procuraba muchos beneficios, y a la que los Apóstoles liberaron con un exorcismo. En la cárcel, en vez de lamentarse, alababan a Dios y Él los salvó mediante un terremoto que sacudió la prisión y rompió las cadenas que los ataban.

Y, por último, la conversión y el bautismo del carcelero y de toda su familia. En medio de la noche, él creyó en el Señor Jesús, junto a toda su familia, acogió a los apóstoles en su casa, les lavó las heridas y recibió el Bautismo. Después, lleno de alegría por haber creído en Dios preparó la mesa y celebraron una fiesta. En medio de la noche, para el carcelero y su familia brilló la luz de Cristo, se rompieron las cadenas del corazón y experimentaron una alegría indescriptible.

Saludo cordialmente a los peregrinos de lengua española. Pidamos al Espíritu Santo que nos dé un corazón abierto a Dios y acogedor con los demás, con una fe audaz capaz de romper las cadenas que nos oprimen a nosotros y a los demás. Que Dios los bendiga.

Llamamiento del Santo Padre poe Irak

“Queridos hermanos y hermanas, mi pensamiento va al amado Irak, donde las manifestaciones de protesta que se realizaron durante este mes causaron numerosos muertos y heridos. Mientras expreso mi condolencia a las víctimas y mi cercanía a sus familias y a los heridos, invito a las Autoridades a escuchar el grito de la población que pide una vida digna y tranquila. Exhorto a todos los iraquíes, con el apoyo de la comunidad internacional, a recorrer la vía del diálogo y de la reconciliación, y a buscar las justas soluciones a los desafíos y a los problemas del país. Rezo para que aquel pueblo martirizado pueda encontrar paz y estabilidad tras tantos años de guerra y de violencia”.