Comienza el verano. Y, con él, un nuevo movimiento en el mapa episcopal. O al menos, en las 'quinielas' que, cada vez con más fuerza, circulan entre las curias y los mentideros eclesiales. ¿Tormentas de verano? Estos meses son especialmente relevantes de cara a analizar cambios que pueden darse para un comienzo de curso que se presenta la mar de interesante.

Una vez desatascado el destino de Luis Argüello (y abierto el 'melón' de su sucesión en la Secretaría General y/o Portavocía de la CEE), se retoman, con más fuerza que nunca, algunos posibles movimientos. Apuntamos algunos de ellos:

Valencia

En la segunda diócesis (por habitante) de España, suenan tambores de cambio. Pese a que desde el entorno más cercano al cardenal Cañizares se asegura que el purpurado no se jubilará, al menos, hasta abril del año próximo, lo cierto es que cada vez circulan con más fuerza los nombres de posibles sustitutos para el de Utiel, que podría conocer su cese en agosto, y hacerse efectivo (toma de posesión) en octubre. ¿Quiénes suenan como candidatos? A día de hoy, tres nombres sobresalen por encima del resto.

El más sorprendente (y el que tiene mayores papeletas) es el actual obispo de Barbastro-Monzón, Ángel Pérez Pueyo. Un hombre querido, y apreciado, por sus pares, y que tendría que sortear las dificultades personales para aceptar este encargo, que no ha buscado (está feliz en la diócesis que vio nacer a Escrivá de Balaguer). Junto a él, otros dos nombres que aparecen en varias quinielas: el auxiliar de Madrid, José Cobo (quien también suena para Granada y para la Secretaría General de la CEE, aunque no son pocos los que lo sitúan, dentro de un par de años, siguiendo los pasos de Argüello y sucediendo a su cardenal). El tercero en discordia sería Jesús Sanz Montes. El franciscano también aparece, y con fuerza, para suceder a Julián Barrio en Compostela -iría de Don Pelayo a Santiago-.

Desde Valencia (no para Valencia), se escuchan cada vez con más insistencia dos nombres: el del auxiliar de Valencia, Arturo Ros, quien podría recalar en alguna diócesis catalana; y José Luis Sánchez, un hombre apreciado por todas las sensibilidades y con gran capacidad de organización. Que falta hace en nuestra Iglesia.

Santiago de Compostela

Hablábamos antes de Jesús Sanz, quien tal vez no logrará su sueño de alcanzar una de las tradicionales sedes cardenalicias (Madrid o Valencia lo son, así como Sevilla, que ya parece inalcanzable), pero sí estaría en otra de las quinielas, en esta ocasión en la sede del Apóstol. En Compostela, no obstante, tendría un durísimo competidor, y con padrino (con visita al Papa incluida): el obispo de Lugo, Alfonso Carrasco Rouco.

Granada

Otra de las sedes para la que existen candidatos claros, toda vez que no parece probable que el Papa conceda prórroga a Javier Martínez. De hecho, hasta se rumorea la posibilidad de un obispo coadjutor. En todo caso, y además de José Cobo, el nombre que más suena es el de Ginés García Beltrán, quien también habría perdido buena parte de sus opciones en una hipotética carrera sucesoria de Madrid que, por el momento (y pese a los frustrados intentos de los enemigos del cardenal Osoro) aún no se ha planteado. Como tampoco la de Barcelona.

Otras sedes

Junto al previsible movimiento de sedes (Oviedo, Getafe o Barbastro, si se confirmaran algunos de los rumores), se encuentran otras diócesis cuyo titular se espera en las próximas fechas. Pamplona-Tudela y San Sebastián son dos de las más codiciadas, para los que se buscan sacerdotes (o religiosos) con conocimiento y presencia en la provincia eclesiástica, y que puedan tener el carácter suficiente para renovar después de dos pontificados (Munilla y, en menor medida, Pérez) netamente conservadores.

Conferencia Episcopal

Los obispos españoles, reunidos en Permanente, comienzan a plantear quién será el nuevo secretario general y portavoz de la CEE, en sustitución de Luis Argüello. Un puesto difícil, que marcará el presente y el futuro de la institución, y que habrá de traer consigo una profunda renovación en puestos clave y, especialmente, en la comunicación. Por el momento, solo aparece un candidato claro: el obispo auxiliar de Toledo, César García Magán, quien podría traer su propio equipo, tanto para la portavocía (separar ambas funciones es más que una opción hoy por hoy) como para la gestión comunicativa y económica.

Sin embargo, tanto José Cobo como el obispo de Astorga, Jesús Fernández (quien ya estuvo a punto de ser elegido, y fue obligado a retirarse de la carrera por Julián Barrio), suenan con fuerza. Ahora mismo, la opción con más consenso es la de un obispo auxiliar, lo que limitaría las opciones de Fernández. 

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Nota rampante: nótese que no se ha nombrado en momento alguno a Luis Ángel de las Heras, ni a Joseba Segura. Llamados, con total seguridad, a liderar el episcopado español en el futuro, a medio plazo. Junto a Cobo. Al menos, a lo largo de este pontificado.

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