"Se oyeron unos tiros, pasó la Guardia Civil con sus fusiles" Pikaza: "Uno de Mayo a tiros. Aún siento el frío del tac-tac de los fusiles"
El “régimen” de Franco no dejaba celebrar el Uno de Mayo, ni la Iglesia lo había "bendecido", re-convirtiéndolo en día de San José “obrero”
Hoy, 1 de mayo,2021, no puede borrar la imagen de obreros corriendo, guardia civil disparando, niños escondidos en un portal, cerca de una antigua cruz, con Jesús muriendo, en plena calle con perseguidos (imagen), con tiros de gente que decía ser cristiana.
Tengo la impresión de que algunos políticos actuales toman aquel tiempo como glorioso y apelan otra vez a sus 'principios'. No entiendo (¿o entiendo?). Simplemente me da miedo"
Tengo la impresión de que algunos políticos actuales toman aquel tiempo como glorioso y apelan otra vez a sus 'principios'. No entiendo (¿o entiendo?). Simplemente me da miedo"
Era el año 1952 (quizá el 1953): J. Ramón y yo cursábamos ya el bachillerato de aquel tiempo, en la "academia" de Durango (los jesuitas no tenían colegio abierto, y no había instituto). Bajamos del trencito de Abadiño, cruzamos Ezkurdi y caminamos hacia la Academia,por Kurutziaga.
De pronto, gente corriendo; se oyeron unos tiros, pasó la Guardia Civil con fusiles. A lo lejos un grupo de obreros de una fábrica de “hierros” que estaban ya disolviendo la manifestación prohibida del Uno de Mayo, algo más allá de la Cruz de Kurutziaga, entonces en la calle, frente a los Jesuitas.
No creo que hubiera muertos, pero hubo tiros. El “régimen” de Franco no dejaba celebrar el Uno de Mayo, ni la Iglesia lo había "bendecido", re-convirtiéndolo en día de San José “obrero”, ni el “caudillo” había transformado ese día en Celebración del Orgullo de la Raza Trabajadora.
No recuerdo mucho más. Sólo silencio en un portal, mirando escondidos la “fiesta” desde la semi-oscuridad, con los obreros escapando y la Guardia Civil nerviosa apuntado de lejos con fusiles. Durante unos minutos se pudo mascar el silencio en la calle.
No nos habían dicho nada en casa sobre la “fiesta”, aunque sabíamos que era un día “peligroso” para los “derechas” del caudillo… Mi hermano J. Ramón y yo callados en el portal… Nos acompañaba un chico algo mayor (que fue después alcalde al pueblo), que sabía más… Y nos dijo:
- Es el día de los obreros que quieren tener libertades y no son de Franco. Franco les tiene miedo… y por eso manda a la Guardia Civil que dispare, si hace falta, aunque muchos guardiaciviles no quieren. Yo creo que no han tirado a matar. Dentro de un ratito podremos seguir, como si nada. Pero esto no puede quedar así, los obreros tienen derecho, el trabajo está por encima de España.
Creo que nos dijo así, a lo mejor interpreto… Al llegar a la academia vimos a D. José María Duñabeitia, el cura director de la Academia, que había podido salir del Penal de Ocaña, esperándonos nervioso (éramos los últimos, los que veníamos en el trencito). Se alegró de vernos. Le preguntamos qué pasaba y nos dijo “otro día os cuento, cuando seáis mayores”... y hasta hoy..
Nos hicimos mayores. Mi hermano J. Ramón entendió. Yo creo que menos. Hoy, 1 de mayo del 2021, no puede borrar de los ojos a los obreros corriendo, la guardia civil disparando, los niños escondidos en un portal, cerca de una cruz antigua, con un Jesús muriendo en plena calle con todos los perseguidos (imagen), oyendo tiros de la gente que decía ser cristiana.
Tengo la impresión de que algunos políticos actuales toman aquel tiempo como glorioso y apelan otra vez a sus "principios". No entiendo (¿o entiendo?). Simplemente me da miedo.
La calle de Durango (imagen) es la misma que veíamos desde el portal oscuro, aunque el Cristo que muere ya no está en la calle, sino en un museo cercano (era demasiado valioso para seguir en la calle). Pero el tac-tac de los tiros no ha dejado de sonarme desde entonces.