Palabras y proyectos de Francisco

Francisco está proponiendo reformas en el Vaticano y en toda la iglesia, pero, algunos se hacen sordos a sus proposiciones, como si fuera una simple tormenta de verano. Le dejan hacer. Pronto pasará, se dicen, y las aguas volverán a su cauce, como ha sido en los últimos mil años de vida de la Iglesia, desde la Reforma Gregoriana.

            Pero da la impresión de que Francisco está preparando una estrategia propia que puede resultar triunfadora, como muestran sus gestos y anuncios de Pentecostés 2022, con su anunciado “consistorio”, que parece que será “constituyente.

 (1) Por un lado, Francisco es franciscano. Le gusta quedarse desnudo, devolviendo a su padre su vestido de riqueza nobiliaria, para iniciar como Jesús un camino en  pobreza, sin tener ni siquiera una piedra donde reclinar su cabeza (Mt 8, 18-20), ni la del inmenso Vaticano.

(2) Por otro, Francisco es jesuita, como Ignacio de Loyola, hombre de  estrategia, acostumbrado a las batallas de una guerra de Dios en las que se gana perdiendo, dando la vida en amor por los otros, dejándoles que ganen: “Si no dais y entregáis lo que sois no podréis ser discípulos míos” (parábola de la torre y la guerra, Lc 14, 25-33).

 (3). Finalmente, Francisco es papa del Espíritu Santo, y quiere que el mismo Dios dirija el camino y el futuro de la Iglesia.   Desde este triple fondo pueden entenderse sus gestos de Pentecostés 2022. 

Dios dirige el camino y el futuro de la Iglesia. 

  Muchos afirman en Roma que está decidido a renunciar al papado por su cojera (debería someterse a una operación delicada y de resultado incierto. Otros rechazan esa hipótesis, diciendo que dos expapas serían demasiado para la casita de campo de los jardines vaticanos donde descansa ya Benedicto XV. Pero algunas señales nos invitan a pensar de un modo distinto.

-El 29 de Mayo, en vísperas de Pentecostés, el Papa anunció la celebración de un gran Consistorio, para el 27-28 de Agosto, al fin del verano con la creación de 21 nuevos Cardenales, como si quisiera preparar el nuevo con-Clave de Pentecostés para el otoño de este mismo 2022, con el nombramiento de un nuevo Papa, que ratifique sus propuestas de Gran sínodo y reforma de la Iglesia.

- En ese contexto el Papa anuncia que el 28 de Agosto, en pleno Consistorio, visitará la catedral de Aquila, donde se conservan los restos de San Celestino (1215-1296) que renunció al papado y se retiró a un eremitorio… De esa forma, Francisco quiere celebrar el jubileo de la Gran Perdonanza, el jubileo celestiniano. Benedicto XVI visitó también la tumba de san Celestino antes de renunciar al papado

Es normal que en ese contexto de Consistorio y Perdonanza,  se hayan disparado fuera y dentro del Vaticano Iglesia los rumores sobre el Papa Francisco, con su intento de reforma de la Curia (en el contexto de un  gran Sínodo ecuménico) y con su posible renuncia al papado por razones personales de enfermedad e institucionales de resistencia de parte de la iglesia.    

Como en el primer Pentecostés

Parece que el Papa Francisco quiere resituar su “reforma en el contexto del primer “consistorio” de Pentecostés, año 30,cuando se reunieron  en el “cenádulo de Sion  los primeros grupos cristianos: 

Pedro, Juan, Santiago y Andrés, Felipe y Tomás, Bartolomé y Mateo, Santiago el de Alfeo y Simón el celota y Judas el de Santiago. Todos estos perseveraban con un mismo interés, en oración, junto con algunas mujeres y María, la madre de Jesús, y sus hermanos» (Hech 1,13-14). 

Primero están los once, cuyos nombres se citan expresamente (cf. también 6,14-16), como signo y compendio de la iglesia militante, que ha de abandonar sueños pasados de gloria (con cetro de mando del Reino) y ponerse al servicio del Espíritu de Cristo.

Junto a ellos están las mujereshan acompañado a Jesús, le han entendido, le han querido y han dado la nueva voz de alerta y camino desde la vera de la tumba abierta y misionera de Jesús crucificado. Ellas le han visto morir (Lc 23,49); han sido testigos de su entierro (Lc 23,55-56)y, sobre todo, mensajeras de su resurrección. Sin su presencia en la primera comunidad la Iglesia no hubiera nacido.

Están además los hermanos de Jesús, que pueden ser sus parientes de carne, judíos, pero ser también hambrientos y sedientos, desnudos y extranjeros…, enfermos y encarcelados (Mt 25, 31-46. Sin ellos nos puede haber consistorio y cónclave de iglesia.

Finalmente está María, la madre, como signo de todo el camino materno de la historia humana. 

Conclusión

Estos grupos han de estar al fondo del nuevo consistorio de Francisco: las mujeres de la pascua, los parientes/hermanos de carne y dolores, la madre…Un Consistorio  sin ellos no sería cristiano.  

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