Acerca de Ángel Manuel Sánchez

Nacido en Ciudad Real y de padres extremeños. Casado con Ana María, madrileña de sangre riojana y extremeña.Ingresa a los 15 años en el Seminario Menor de Ciudad Real y realiza dos veces el prenoviciado de la Compañía de Jesús, al comienzo y al final de sus estudios universitarios. Después de este largo período de discernimiento vocacional y tras un año académico (1999-2000) residiendo en la Katholische Hochschulgemeinde de Linz (Austria), ejerce como abogado en Ciudad Real y se traslada a Madrid para preparar oposiciones. Reside en el Colegio Mayor de los agustinos Mendel y en esta etapa conoce a su esposa. Tras aprobar oposiciones vive don años en Gerona y vuelve a Madrid donde vive en la residencia de la Fundación Pablo VI hasta casarse. Tienen un hijo, José Ignacio.

Ha sido voluntario en el Hospital Psiquiátrico de Ciudad Real, en Cáritas Diocesana, ha sido catequista de confirmación y animador de coros. Ha formado parte del Consejo Local de la Juventud de su ciudad natal durante dos años como miembro de Nuevas Generaciones del Partido Popular, formación que abandonó tras este servicio.

Licenciado en Derecho por la Universidad de Castilla- La Mancha y con estudios no concluidos en licenciatura de Historia. Abogado y Máster en Asesoría fiscal. Funcionario de carrera de la Agencia Estatal de la Administración Tributaria. Reside y trabaja actualmente en Madrid.

SOBRE EL BLOG EL MUNDO DESCIFRADO

Este título está sacado de la colosal obra "El Criticón" del jesuita español Baltasar Gracián, que con magistral lenguaje del barroco nos exhorta de esta manera:

" Seréis hombres tratando con los que lo son, que esso es propiamente ver mundo; porque advertid que va grande diferencia del ver al mirar, que quien no entiende no atiende: poco importa ver mucho con los ojos si con el entendimiento nada, ni vale el ver sin el notar. Discurrió bien quien dixo que el mejor libro del mundo era el mismo mundo, cerrado cuando más abierto (...). La dificultad la hallo yo en leer y entender lo que está de las tejas abaxo, porque como todo ande en cifra y los humanos coraçones estén tan sellados y inescrutables, assegúroos que el mejor letor se pierde (...)"

El arte de descifrar es el arte de discurrir y consiste en leer al derecho lo que aparece al revés. La persona discreta debe descubrir la Verdad en lo que es y se es, oculta debajo de lo que parece ser (lo verosímil).

Baltasar Gracián nos ofrece un método por el que guiarnos en el sublime arte de leer al derecho lo que aparece al revés. Y para ello nos propone detectar y distinguir las falacias más extendidas.

La primera es la hipocresía. Es la mezcla de rasgos opuestos (diptongos los llama Gracián) y su intención es mezclar y confundir. Es la caricomposición de vicio y virtud. La falsedad del contenido por el contenido, donde la forma poco nos debe importar sino es para permitirnos indagar más allá. Es una falsedad descarada.

La segunda es la ambigüedad. Consiste en jugar al despiste. Baltasar Gracián los llama etcéteras y qutildique, y su intención es decir mucho explicándose poco o aparecer como una cosa siendo la contraria. Es la falsedad de la forma por el contenido, que al descubierto compromete. Es la falsedad disimulada.

La tercera es el relativismo. Consiste en negar absolutos y es llamado alterutrum por Gracián. Es el todo vale si nada vale. Es la falsedad en sentido pleno, la falsedad que busca justificación a lo injustificable. Es la falsedad descarnada y desmoralizadora.

Todas estas falacias se reconocen por su oposición a la virtud de las formas y a la verdad de los contenidos, y resultan tan vigentes hoy como en el siglo XVII. El arte de discernir con el conocimiento adquirido (ciencia y experiencia) y con la intuición fundada en el análisis metódico de las mociones interiores, maduran y agudizan el olfato de la persona ávida de encontrar la verdad oculta bajo las tejas, la verdad entre-líneas, la Verdad al desnudo.

Este blog pretende enriquecer el modo de ver la realidad de cada cual. Citaba San Ignacio de Loyola que "No el mucho saber harta y satisface al alma sino el sentir y gustar de las cosas internamente". Podemos y debemos contemplar la realidad con la mente y con el corazón, porque este es el modo completo y certero de descifrar este mundo complejo.

Los artículos publicados en el blog no buscan el aplauso de sus lectores, quizás busquen simplemente ser entendidos, y algo más profundo: el enriquecimiento mutuo, gracias a la comunicación que puede producirse a través de los comentarios y correos que los lectores pueden mantener con su autor. El autor quisiera esencialmente realizar una revisión constante y recíproca de su método de análisis de la realidad con las aportaciones de los lectores y comentaristas. Al autor le interesa la forma de mirar más que la descripción de la realidad. El autor no es periodista ni pretende serlo.

La utilización de un buen método de análisis es lo verdaderamente original en el universo mundo de la opinión pública, y el autor propone uno: el método ignaciano con matices personales. La integridad en el mirar nos debe permitir conocer justamente, y justamente reaccionar frente a las medias verdades que son medias mentiras. Con la participación activa de los lectores sin la cual seria imposible, toda la ambición pues para este blog.
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