¡Hasta cuándo esperarás, hermano, a tomar tu cayado de revolucionario de la Madre! 💙 ¡Para ti, lo mejor está por recibir; para la Madre, lo mejor está para ti!
Hermano
Si haces la experiencia del subversivo de la Madre, no te pesará...
Legiones de hermanos y hermanas te aguardan en las periferias del amor de la Madre
Legiones de hermanos y hermanas te aguardan en las periferias del amor de la Madre
| Alfonso Olaz
💙 ¡Para ti, lo mejor está por recibir; para la Madre, lo mejor está para ti!
Sin sueños, ni falsas promesas de anuncios publicitarios, de hierros de óxido y luces de neón,
que nacen y mueren en cada instante.
De la mejor Madre, para TI
Con el pañuelo azul en la cabeza
Del vestido verde de la esperanza
Con la sonrisa cómplice de la Madre
Con la postura de la revolucionaria que no cesa
De la mejor Madre, para TI
Con el pañuelo azul en la cabeza
Del vestido verde de la esperanza
Con la sonrisa cómplice de la Madre
Con la postura de la revolucionaria que no cesa
¡A cuantos hijos tuyos has iluminado este día,
para que sean tus revolucionarios subversivos de tu amor!
¡Hasta cuándo esperarás, hermano, a tomar tu cayado de revolucionario de la Madre!
Hermano
Si haces la experiencia del subversivo de la Madre, no te pesará...
Legiones de hermanos y hermanas te aguardan en las periferias del amor de la Madre
¡Para ser Revolucionario de la Madre!
Solo necesitas de su confianza total
No esperes más y confía
Adora, confía y espera.
Esas son tus armas invencibles
Quien adora a la Madre
La Madre permanece en él.
Quien confía en la Madre nada le falta: nada, nada
Quien nada le falta, todo lo confía: todo, todo
¡Qué tesoro de azul y verde!
Más preciosos que los rubíes y esmeraldas, de esta tierra roja
de ricos y oprimidos
Madre
Nos llegas cada día
Sin hacer ruido
Como brisa y aire sereno de tu mirada
Como tu sonrisa de lluvia fina y pertinaz que nos empapa y no nos moja
De tu voz, de rayos de sol que nos traspasa sin dolor,
y nos deja heridos de nuevos bríos
Para que te reconozcamos como Luna y Sol
¡Así eres tú!
Para que te reconozcamos como Luna y Sol
¡Así eres tú!
Madre
¡Compañera siempre nueva y siempre antigua!
Siempre infatigable y solidaria
¡Compañera siempre nueva y siempre antigua!
Siempre infatigable y solidaria
Que el amor se tornó en ti
Por haber dicho sí.
Por haber dicho sí.
Y el cielo bajó a ti, por vez primera
Para ser ya Cielo y protector primero de todos tus hijos:
Para ser ya Cielo y protector primero de todos tus hijos:
de los más fieles,
de todos los tuyos
Y desfavorecidos de esta tierra roja
¡Hágase en ellos tu Voluntad de Madre!
Hágase con ellos tu Voluntad primera, la de María
La de amar sin medida a tus hijos oprimidos,
para liberarlos del pecado de las calamidades de este mundo
Para devolverles la dignidad de los hijos de María.
¡Madre nuestra, nuestra!
Con el pañuelo azul de la humildad posible
Con el vestido verde de la sencillez que no espera
Ofreciendo tus manos blancas
Y obedeciendo a lo que tu carnal hijo, dice:
"Quien no está conmigo, está contra mí"
Madre
¡Qué maravilla eres!
Y de tu vientre, salió el único y mejor fruto de todos,
Para devolverles la dignidad de los hijos de María.
¡Madre nuestra, nuestra!
Con el pañuelo azul de la humildad posible
Con el vestido verde de la sencillez que no espera
Ofreciendo tus manos blancas
Y obedeciendo a lo que tu carnal hijo, dice:
"Quien no está conmigo, está contra mí"
Madre
¡Qué maravilla eres!
Y de tu vientre, salió el único y mejor fruto de todos,
de todos los hombres
¡Al nombre de Jesús!
¡Al nombre de Jesús!
No busques más, hermano
Descansa de tu agonía perpetua
Que eres una hermosura de criatura, hijo de la Madre
Haz la experiencia de la Madre
La experiencia del hijo amado
No te cuesta más tiempo
Que el que dedicas a tomarte un buen café
Y así con total confianza diré
Plegaria sincera del hijo a la Madre
"Madre, aquí estoy, enséñame tu corazón para ver el mío sin ya asustarme,
y así ya juntar el mío con el tuyo, para siempre"
Madre
El cielo todo a ti ha bajado
Pidiéndote tu permiso
Y se ha abajado para coronarte
Para darte las gracias y vestirte con sus amores
De Misericordia, paz y bien.
Madre
Que no espere lo que no haya de Ti
Pues todo soy de ti
Ni haga lo que no debo sin Ti
Porque nada ya debo
Pues ya nada debiendo contigo..
¿A quién deberé por no ser tenido?
Si no, daré todo lo recibido
Que nada es mío
Si no de la Madre todo lo recibido
¡Tú me das todo Madre mía!
Yo me confío del todo.
Y así te adoro, confío y espero
En esto se resume toda el alma del hijo de la Madre
Todo el misterio y el ansia del hombre:
Madre
El cielo todo a ti ha bajado
Pidiéndote tu permiso
Y se ha abajado para coronarte
Para darte las gracias y vestirte con sus amores
De Misericordia, paz y bien.
Madre
Que no espere lo que no haya de Ti
Pues todo soy de ti
Ni haga lo que no debo sin Ti
Porque nada ya debo
Pues ya nada debiendo contigo..
¿A quién deberé por no ser tenido?
Si no, daré todo lo recibido
Que nada es mío
Si no de la Madre todo lo recibido
¡Tú me das todo Madre mía!
Yo me confío del todo.
Y así te adoro, confío y espero
En esto se resume toda el alma del hijo de la Madre
Todo el misterio y el ansia del hombre:
que vaga mientras es hombre, para dejar de vagar cuando ya es hijo de la Madre.
Del Evangelio de la Madre a la Vida del hijo
De la Vida del hijo, al Evangelio del hermano pobre, a la vida verdadera
Del Evangelio de la Madre a la Vida del hijo
De la Vida del hijo, al Evangelio del hermano pobre, a la vida verdadera