Día Mundial de la Alimentación: Asistencialismo y Operación Kilo
Ayer fue el Día Internacional de Erradicación de la pobreza, y anteayer el de la Alimentación. Sobre aquel hemos enviado algunos puntos de reflexión. Ahora vamos a hacerlo sobre la Alimentación. Los instintos más primarios de todo ser vivo son alimentarse y reproducirse.
La Asociación Alambique de Gijón preparó para celebrar el día de la Alimentación varias reuniones de análisis del problema. En el grupo con el que me tocó trabajar llegamos, como conclusión final al siguiente planteamiento: "lo que son Derechos Humanos (alimentación, sanidad, educación, etc.) no deben ser objeto de Asistencialismo (operación Kilo, etc.), sino de reivindicación justa y obligatoria ante el Estado". Como aportación al tema hicimos entrega a los participantes del siguiente análisis:
El sistencialismo y Operación KIlo
En España estamos asistiendo al renacer masivo y multiforme del asistencialismo más puro y duro. La operación KILO es su imagen más visible y manipuladora, que beneficia en primer lugar a los supemercados, porque así venden más, ya que de esta manera venden a través de los que pueden pagar a quienes no pueden hacerlo. Las reacciones ante la realidad de injusticia y desigualdad que hay en la sociedad, donde los ricos con la crisis se hicieron más ricos hasta un 40 %, y los pobres más empobrecidos, son de tres clases:
-Los que no pasan de tener Conciencia Ingenua y simplemente dicen: “esto siempre fue así, esto no tiene solución, esto no hay quien lo arregle”. Pero lo cierto es que no siempre fue así, ni tiene por qué ser así: la desigualdad en 1960 era de 1 a 30, hoy en muchos casos llega de 1 a 214. Oxfam ha publicado un estudio que revela que el 1 por ciento más rico de la población mundial tendrá más dinero que el 99 restante en 2016.
-Los que tienen Conciencia Mágica, que son millones, y quieren resolver su situación mediante un golpe de magia o suerte: las quinielas, el cupón, los juegos de azar, la primitiva, las loterías, los concursos televisivos, etc. Un país no se construye así porque eso no produce nada; un país se construye trabajando. El trabajo es la forma normal de salir de la pobreza.
-Los que son llevados por la Conciencia Mítica, seducidos por los señuelos de los mitos del mercado: futbolistas, deportistas, cantantes, famosos de la TV, artistas, modistos y modas, etc. El neoliberalismo no quiere que el pueblo piense, sino que consuma y duerma, porque un pueblo dormido no molesta.
Las conciencias Mágica, Mítica e Ingenua producen personas manipuladas y una sociedad anestesiada, manipulada, oprimida, paralizada.
Frente a estas tres clases de CONCIENCIA, están:
La Conciencia Crítica: es saber por qué y para que suceden las cosas, qué hay detrás de los hechos de opresión; quién, cómo y para qué nos oprime. Qué causas y causantes están generando oprimidos, tanto en el orden económico, como político, cultural, religioso y ecológico.
La Conciencia Política: Es asumir el compromiso de construir una nueva sociedad porque nada es indiferente, nada es neutro, todo es político, incluso el no querer saber nada y pasar de todo ya es política.
La Conciencia Histórica: Es descubrir el devenir histórico que a lo largo de los años ha dado lugar a la realidad actual de opresión, de desigualdad, de injusticia, de asimetría social. Y descubrir también a dónde nos va a llevar esta situación, qué futuro nos espera a corto y medio plazo, qué retos debemos asumir porque:
-Todo lo que sucede tiene un proceso, todo tiene un devenir. Nada sucede al azar.
-Si hay oprimidos es porque hay opresores.
-En el mundo actual ninguna riqueza es inocente: donde hay riqueza es porque está generando pobreza y opresión.
Las conciencias Crítica, Política e Histórica producen personas libres y una sociedad consciente, crítica, liberadora, movilizada.
Luchar para que no haya ni oprimidos ni opresores es tarea ineludible de todos, es nuestra misión en el mundo: es liberar al opresor de oprimir y al oprimido de la opresión, para la liberación integral de ambos.
Nota.-El Asistencialismo puede ser aceptable en situaciones extremas, en emergencias, etc., pero no resuelve la realidad de una sociedad injusta que estructuralmente produce opresores y oprimidos, no personas libres e iguales en derechos, porque el asistencialismo solo da de comer puntualmente, pero no quita el hambre ni el subdesarrollo. En todo caso ha de ser utilizado como plataforma de un proceso educativo y reivindicativo de los derechos humanos de las personas.
FAUSTINO VILABRILE. E-mail: faustino.vilabrille@gmail.com
La Asociación Alambique de Gijón preparó para celebrar el día de la Alimentación varias reuniones de análisis del problema. En el grupo con el que me tocó trabajar llegamos, como conclusión final al siguiente planteamiento: "lo que son Derechos Humanos (alimentación, sanidad, educación, etc.) no deben ser objeto de Asistencialismo (operación Kilo, etc.), sino de reivindicación justa y obligatoria ante el Estado". Como aportación al tema hicimos entrega a los participantes del siguiente análisis:
El sistencialismo y Operación KIlo
En España estamos asistiendo al renacer masivo y multiforme del asistencialismo más puro y duro. La operación KILO es su imagen más visible y manipuladora, que beneficia en primer lugar a los supemercados, porque así venden más, ya que de esta manera venden a través de los que pueden pagar a quienes no pueden hacerlo. Las reacciones ante la realidad de injusticia y desigualdad que hay en la sociedad, donde los ricos con la crisis se hicieron más ricos hasta un 40 %, y los pobres más empobrecidos, son de tres clases:
-Los que no pasan de tener Conciencia Ingenua y simplemente dicen: “esto siempre fue así, esto no tiene solución, esto no hay quien lo arregle”. Pero lo cierto es que no siempre fue así, ni tiene por qué ser así: la desigualdad en 1960 era de 1 a 30, hoy en muchos casos llega de 1 a 214. Oxfam ha publicado un estudio que revela que el 1 por ciento más rico de la población mundial tendrá más dinero que el 99 restante en 2016.
-Los que tienen Conciencia Mágica, que son millones, y quieren resolver su situación mediante un golpe de magia o suerte: las quinielas, el cupón, los juegos de azar, la primitiva, las loterías, los concursos televisivos, etc. Un país no se construye así porque eso no produce nada; un país se construye trabajando. El trabajo es la forma normal de salir de la pobreza.
-Los que son llevados por la Conciencia Mítica, seducidos por los señuelos de los mitos del mercado: futbolistas, deportistas, cantantes, famosos de la TV, artistas, modistos y modas, etc. El neoliberalismo no quiere que el pueblo piense, sino que consuma y duerma, porque un pueblo dormido no molesta.
Las conciencias Mágica, Mítica e Ingenua producen personas manipuladas y una sociedad anestesiada, manipulada, oprimida, paralizada.
Frente a estas tres clases de CONCIENCIA, están:
La Conciencia Crítica: es saber por qué y para que suceden las cosas, qué hay detrás de los hechos de opresión; quién, cómo y para qué nos oprime. Qué causas y causantes están generando oprimidos, tanto en el orden económico, como político, cultural, religioso y ecológico.
La Conciencia Política: Es asumir el compromiso de construir una nueva sociedad porque nada es indiferente, nada es neutro, todo es político, incluso el no querer saber nada y pasar de todo ya es política.
La Conciencia Histórica: Es descubrir el devenir histórico que a lo largo de los años ha dado lugar a la realidad actual de opresión, de desigualdad, de injusticia, de asimetría social. Y descubrir también a dónde nos va a llevar esta situación, qué futuro nos espera a corto y medio plazo, qué retos debemos asumir porque:
-Todo lo que sucede tiene un proceso, todo tiene un devenir. Nada sucede al azar.
-Si hay oprimidos es porque hay opresores.
-En el mundo actual ninguna riqueza es inocente: donde hay riqueza es porque está generando pobreza y opresión.
Las conciencias Crítica, Política e Histórica producen personas libres y una sociedad consciente, crítica, liberadora, movilizada.
Luchar para que no haya ni oprimidos ni opresores es tarea ineludible de todos, es nuestra misión en el mundo: es liberar al opresor de oprimir y al oprimido de la opresión, para la liberación integral de ambos.
Nota.-El Asistencialismo puede ser aceptable en situaciones extremas, en emergencias, etc., pero no resuelve la realidad de una sociedad injusta que estructuralmente produce opresores y oprimidos, no personas libres e iguales en derechos, porque el asistencialismo solo da de comer puntualmente, pero no quita el hambre ni el subdesarrollo. En todo caso ha de ser utilizado como plataforma de un proceso educativo y reivindicativo de los derechos humanos de las personas.
FAUSTINO VILABRILE. E-mail: faustino.vilabrille@gmail.com