Hace 100 años que hoy 9 de diciembre moría Josep Meseguer i Costa, obispo de Lleida y después de Granada.

Meseguer, que nació el 9 de noviembre en la localidad valenciana de Vallibona, estudió en Barcelona al lado de su pariente, el obispo Costa Borràs y después en Tarragona, Tortosa y València, donde se doctoró en Teología y en Derecho Canónico. Además fue también licenciado en Derecho Civil. Fue ordenado presbítero en 1867 y fue catedrático de los seminarios de Tortosa y de Tarragona. En 1868 fue nombrado secretario de cámara del obispo de Oviedo, Benito Sanz y Forés.

En 1881 Josep Meseguer fue nombrado canónigo de la catedral de Valladolid y en 1889, obispo de Lleida. Su consagración tuvo lugar en Valladolid el 19 de marzo de 1889, por la imposición de manos de los obispos de Oviedo, Zamora y Ciudad Rodrigo.

Meseguer hizo su entrada en Lleida como nuevo obispo, el 19 de abril de 1890. Durante los 15 años que fue el pastor de la diócesis leridana, Meseguer tuvo una gran actividad pastoral. Así, fue decisiva su intervención en las obras del canal de Aragón y Cataluña, ya que sin su presencia física o moral en Madrid, este canal no se hubiese construido.

Meseguer fue un obispo políticamente incorrecto, ya que en despedir a los soldados que iban a la Guerra de Cuba, les dijo unas palabras que no gustaron a los poderosos: “Si no fuesen los intereses económicos?”.

El obispo Meseguer fundó en 1893 el Museo Diocesano de Lleida, recogiendo objetos y comprándolos a las parroquias y ermitas que se encontraban medio abandonadas. Y es que Josep Meseguer tenía la idea de crear un museo para guardar el abundante patrimonio que había en la diócesis, que en aquel tiempo comprendía también las parroquias de la Franja de Aragón y que desde la división del obispado de Lleida, ahora pertenecen a la diócesis de Barbastro-Monzón. Así, Meseguer recuperó retablos, imágenes, objetos litúrgicos y otros elementos patrimoniales, que él intercambiaba o compraba a las parroquias que visitaba y que se encontraban en muy mal estado. De hecho, de no haber sido por el obispo Meseguer, muchas obras de arte se hubiesen perdido, malvendido o bien hubiesen sido expoliadas y por eso habrían desaparecido de la diócesis.

Meseguer fue senador durante la legislatura 1899-1900, por el Arzobispado de Tarragona y del 1905 al 1907, senador por derecho propio.

Su obra más notoria fue la construcción del Seminario de Lleida. En su Dietario personal, el obispo Meseguer iba anotando con todo detalle las visitas pastorales que le servían para conocer el estado en qué se encontraba el patrimonio artístico de las parroquias de su diócesis. Como ha dicho el profesor Ximo Company, el obispo Meseguer es “el artífice de una colección única sobre la historia del obispado”.

Después de 15 años en Lleida, el 27 de marzo de 1905 Josep Meseguer fue nombrado obispo de Granada, donde murió el 9 de diciembre de 1920, hoy hace 100 años.

Josep Miralles, en aquel momento obispo de Lleida, pidió a los leridanos que rezaran por el obispo Meseguer, “aquel excelso varón, poderoso en obras y en palabras, que murió bendiciendo a todo el mundo”.