"Lo último desde los últimos. Esbozo de esperanza y escatología cristianas" Escatología cristiana para abrirle la puerta a "una esperanza universal"
El autor del libro, Josep Giménez Meliá, imparte Escatología en la Universidad, en Barcelona y es autor de varios libros y miembro del Seminario Teológico del Centro “Cristianisme i Justicia”
La lectura del nuevo libro editado por “Sal Terrae” en su colección “Presencia Teológica”, habría que comenzarla precisamente por la página 386 –tiene 390- en la que se transcribe esta letanía –“oración de súplica”- redactada por Pedro Casaldáliga:
“Yo me atengo a lo dicho: La justicia, a pesar de la ley y la costumbre,/ a pesar del dinero y la limosna./ La humildad, / para ser yo verdadero./ La libertad,/ para ser hombre./ Y la pobreza/ para ser libre./ La fe, cristiana, / para andar de noche, / y sobre todo, para andar de día./ Y, en todo caso, hermanos, / Yo me atengo a lo dicho:/¡la esperanza!”
El libro de nuestra referencia se titula Lo último desde los últimos. Esbozo de esperanza y escatología cristianas, cuyo autor es Josep Giménez Meliá, “jesuita que estudió en la Facultat de Catalunya y en la Hochschule Sant Georgen, de Frankfurt am Maín, y que actualmente imparte la asignatura de Escatología en la facultat de Barcelona y en el Instituto Superior de Ciencias Religiosas”. Es autor de varios libros y miembro del Seminario Teológico del Centro “Cristianisme i Justicia”.
Del contenido del libro es breve resumen el texto siguiente:
“La escatología es el tratado de lo Último, que es también lo Primero, en cuanto Dios es Alfa y Omega, Principio y Fin. Entre lo Primero y lo Último se sitúa la historia, escenario de logros innegables, pero también escenario de sufrimiento y dolor que ha generado innumerables víctimas. No queremos ni podemos pasar de largo ante este sufrimiento. Tampoco queremos ni debemos renunciar a la esperanza que nos viene de la convicción de que Dios solo tiene una Palabra, que es una Palabra de Amor. Por ello creemos que el tratado de los “novísimos” –“escatología”- solo puede cultivarse creíblemente desde los “últimos”, quienes en el “Último” y “Primero” por excelencia, Jesucristo, crucificado y resucitado, nos pueden abrir las puertas a una esperanza universal”.
Como una de las más grandes y definitivas preocupaciones de los seres humanos -y más de los cristianos- es el “Más Allá”,- escatología-, con sus insondables misterios, la lectura del libro se recomienda por sí misma.
Cuenta mucho en su valoración, interés y aprecio del tema, el convencimiento de que cuanto nos fuera enseñado sobre tal materia apenas si tiene validez teológica, reduciéndose en gran parte su catequesis a suscitar en los adoctrinados muchos más miedos con eso de la muerte, del juicio, del infierno y, por si algo faltara, también del purgatorio. El cielo, y la resurrección -tal y como hemos sido educados en la fe-, apenas sí podían ser destinos para pocos y estos, además, aburridos a perpetuidad.
La falta de consistencia doctrinal en relación con la apasionante asignatura de la llamada escatología cristiana, viene a suplirla con argumentos, sentido común, claridad y acierto este nuevo libro de “Sal Terrae”.