"Gracias a su generosidad -dice el Padre Amal Raj, director del Centro Arquidiocesano de Servicios Sociales, citado por la agencia Eglise d'Asie- la Iglesia Católica ha podido prestar asistencia a los necesitados, fabricar y distribuir máscaras protectoras y gel desinfectante y lanzar programas de concienciación sobre el coronavirus". En el estado de Bihar, donde se encuentra Patna, alrededor del 33% de los habitantes viven por debajo del umbral de pobreza y en toda la región viven más de un millón de trabajadores migrantes internos que se han quedado sin empleo debido a la pandemia.
Una plataforma de solidaridad
Pero la generosidad de los sacerdotes no fue la única nota positiva de este difícil período: la Iglesia Católica de Patna, de hecho, ha lanzado desde 2014 una plataforma interdiocesana, llamada "Sewa Kendra", a través de la cual los católicos han podido llevar a cabo varias obras de caridad. Por ejemplo, a las familias migrantes que se quedaban sin trabajo se les proporcionaba ganado (ovejas, pollos, patos o gansos) para ayudarles a ganarse la vida. Al mismo tiempo, la plataforma ha contribuido al desarrollo socioeconómico de la población local, a la educación de los niños de las aldeas rurales y a la emancipación de las mujeres, ayudándolas sobre todo a salir del analfabetismo.
En el norte de #India la #Iglesia comparte las necesidades materiales de sus fieles. "Una Iglesia pobre y para los pobres", nos dijo el Obispo de Patna, que sirve a los "dalit", la casta más baja de la sociedad hindú... https://t.co/IDYMfiHB6y
— ACN Chile (@ACN_Chile) April 9, 2018
