Entrevista exclusiva: "Nada de pensar en la renuncia del Papa", dice el cardenal hondureño Maradiaga: "Francisco tenía razones para pedirle a Gänswein que no volviera a la oficina"
"No cabe duda de que, con la muerte del papa Benedicto XVI, algunas personas han salido a la luz pública con opiniones críticas con Pontificado de Francisco. Es una pena que muchos hablen de un precónclave. Pareciera que brota el subconsciente. Nada de eso tiene fundamento. El Papa está muy bien salud y está superando los límites del problema de la rodilla. Nada de pensar en su renuncia"
"Es natural que la restricción a la misa en latín le haya causado tal vez un disgusto al papa Benedicto, pero viendo los resultados, me parece que fue muy oportuna y lo seguirá siendo frente a algunos grupos que no han entendido el Concilio Vaticano II"
Sobre si la reforma de la Curia ha tenido que ver con estos ataques al papa: "Claro que sí. Hay personas que prefieren el 'siempre se ha hecho así' y Praedicate Evangelium pide conversión y acción. Además, vendrán cambios de personas y eso no cabe duda que provoca reacciones negativas"
"No nos olvidemos de que los ataques y críticas comenzaron desde el día siguiente a la elección del papa Francisco por parte de aquellos que pensaban que no duraría ni cinco años. Ya se pueden sentar a esperar con fantasiosos precónclaves"
Sobre si la reforma de la Curia ha tenido que ver con estos ataques al papa: "Claro que sí. Hay personas que prefieren el 'siempre se ha hecho así' y Praedicate Evangelium pide conversión y acción. Además, vendrán cambios de personas y eso no cabe duda que provoca reacciones negativas"
"No nos olvidemos de que los ataques y críticas comenzaron desde el día siguiente a la elección del papa Francisco por parte de aquellos que pensaban que no duraría ni cinco años. Ya se pueden sentar a esperar con fantasiosos precónclaves"
El cardenal arzobispo de Tegucigalpa, Óscar Andrés Rodríguez Maradiaga, nadie lo duda, es 'uno de los hombres del papa Francisco'. Su amistad viene de lejos. Dentro de unos días, hará 22 años que ambos recibieron de manos de Juan Pablo II la birreta cardenalicia. Y solo tres días después de ser elegido sucesor de Pedro, Jorge Mario Bergoglio lo llamó por teléfono para ofrecerle ser el coordinador del Consejo de Cardenales que quería poner en marcha para ayudarle en el gobierno de la Iglesia.
El cardenal hondureño aceptó y se convirtió en el director de aquella pequeña orquesta que logró sacar adelante la reforma de la Curia, con muchas más resistencias de las esperadas. Ahora, vuelve a salir en defensa del viejo amigo contra una serie de ataques de algunos que fueron sus estrechos colaboradores. "No nos olvidemos de que los ataques y críticas comenzaron desde el día siguiente a la elección del papa Francisco por parte de aquellos que pensaban que no duraría ni cinco años. Ya se pueden sentar a esperar con fantasiosos precónclaves", señala en esta entrevista con Religión Digital.
En los últimos días hemos asistido a una serie de opiniones muy críticas con el papa Francisco, nada extraño en los últimos tiempos, por otro lado, salvo porque quienes le han puesto de vuelta y media eran muy estrechos colaboradores suyos, como el arzobispo Georg Gänswein el cardenal Pell o el cardenal Müller. ¿Qué está pasando en el Vaticano?
No cabe duda de que, con la muerte del papa Benedicto XVI, algunas personas han salido a la luz pública con opiniones críticas al Pontificado del papa Francisco. Incluso sé de dos libros recientes. Es una pena que muchos hablen de un precónclave. A veces pareciera que brota el subconsciente. Nada de eso tiene fundamento. El papa Francisco está muy bien salud y está superando los límites del problema de la rodilla. Nada de pensar en su renuncia.
¿Se ha leído el libro del secretario de Benedicto XVI, Georg Gänswein?
Lo he leído y no es gran cosa. Me parece que los medios han utilizado tres puntos que tampoco son muy profundos. Es natural que la restricción a la misa en latín le haya causado tal vez un disgusto al papa Benedicto, pero viendo los resultados, me parece que fue muy oportuna y lo seguirá siendo frente a algunos grupos que no han entendido el Concilio Vaticano II.
Respecto al libro con el cardenal Sarah, es evidente que fue una manipulación del nombre y la firma del papa Benedicto. Y el tercer punto es el resentimiento, porque [Francisco] le pidió a monseñor Gänswein que no volviera a su oficina. Sin duda que el Papa tenía razones para pedírselo.
"La fecha escogida para la publicación del libro de monseñor Gänswein me ha parecido de mal gusto"
¿Cree que el difunto Papa emérito hubiera dado las bendiciones a su secretario para publicar un texto que ahonda en la fisura entre ambos papas?
Creo que no lo hubiese hecho, y la fecha escogida para la publicación me ha parecido de mal gusto.
¿Es usted es de los que creen, como el cardenal Pell, que “este pontificado es un desastre”?
No estoy de acuerdo. Me parece que el difunto Cardenal Pell, a quien conocí muy bien durante el tiempo que sirvió en el Consejo de Cardenales, si esa carta es obra suya, está muy equivocado.
El sábado 14 de enero, en los funerales del cardenal Pell, todos pudimos ver a un Francisco sentando en frente del ataúd de quien -al parecer- había dejado un memorando lleno de ácidas críticas contra su persona. ¿Qué pensó usted ante esa imagen?
Por encima de todo está la caridad fraterna, y el juez es el Señor Jesucristo. Conozco el corazón del Santo Padre que, por encima de cualquier ofensa, está lleno de misericordia.
Hay quien sostiene que esta catarata de comentarios, revelaciones (como ahora las de unas disculpas del Papa al cardenal Becciu, que parecen querer decir que este fue tan solo una cabeza de turco de este Pontificado) pretenden acelerar la renuncia de Francisco. ¿Hay un plan contra Bergoglio?
Lo desconozco, pero el proceso contra el cardenal Becciu continúa, y los gestos fraternos del papa Francisco son eso. Él no interviene y son los tribunales los que darán su veredicto. No hay nada de renuncia en el horizonte del Papa.
"Hay personas que prefieren el 'siempre se ha hecho así' y Praedicate Evangelium pide conversión y acción. Además, vendrán cambios de personas y eso no cabe duda que provoca reacciones negativas"
¿Entonces, no cree que esta situación pudiera acelerarla?
Para nada. El Papa es un navegante a quien no arredran las tempestades, porque está guiado por el Espíritu Santo y lleno del ejemplo de Nuestro Señor Jesucristo.
Usted, como coordinador del Consejo de Cardenales, tiene mucha responsabilidad en la reforma emprendida por Francisco y que ha cristalizado en ‘Praedicate evangelium’. ¿Tiene esta reforma de la Curia que ver con estos ataques contra el Papa?
Claro que sí. Hay personas que prefieren el “siempre se ha hecho así” y Praedicate Evangelium pide conversión y acción. Además, vendrán cambios de personas y eso no cabe duda que provoca reacciones negativas.
¿Qué ecos tiene de la implementación de ‘Praedicate evangelium’ en la Curia vaticana? ¿Cómo ha sido acogida?
Yo no resido en El Vaticano y pocos ecos me llegan. Pero el Consejo de Cardenales se encargará de colaborar con el Papa para la implementación de las reformas. Muchas ya están en acto y otras vendrán en el futuro.
Usted ha vivido y participado en dos cónclaves. Estas críticas y ataques, ¿le suenan a precónclave para marcar posiciones?
No nos olvidemos de que los ataques y críticas comenzaron desde el día siguiente a la elección del papa Francisco por parte de aquellos que pensaban que no duraría ni cinco años. Ya se pueden sentar a esperar con fantasiosos precónclaves.
¿Cuál cree que es el factor, el hecho, de este Pontificado que más rechazo ha concitado entre los críticos de Francisco?
Que ha sido valiente en aplicar el Concilio Vaticano II en muchos aspectos que estaban dormidos. Es otra atmósfera la que se respira desde el año 2013 en el Vaticano.
"Siempre las reformas han tardado mucho tiempo en aplicarse, pero actualmente no se puede pensar así. Siempre he dicho que en la caja de cambios del Espíritu Santo no existe la palanca de retroceso"
Las reformas aplicadas en estos diez años de Oontificado, ¿son irreversibles o necesitan años para que cuajen?
Siempre las reformas han tardado mucho tiempo en aplicarse, pero actualmente no se puede pensar así. Siempre he dicho que en la caja de cambios del Espíritu Santo no existe la palanca de retroceso. El Espíritu nos impulsa siempre hacia adelante, aunque existan todo tipo de obstáculos.
Es decir, ¿el próximo Papa seguirá esta línea o prevé un cambio de objetivos?
Ni siquiera pienso en próximo Papa. Y el que venga será también guiado por el Espíritu Santo.
¿Puede ser el Sínodo sobre la Sinodalidad la gran impronta que deje Francisco en su pontificado?
Sin duda alguna, la Sinodalidad es un camino ya emprendido que no se podrá volver atrás.