La Trinidad de Dios nos manifiesta que la diferencia y lo variado son el lugar para hacer la experiencia de Dios.
El Dios Trinidad nos invita a crear relaciones de comunión y reciprocidad generosa.
La creación está marcada está marcada por el signo de un Dios uno y diverso. La belleza, la bondad y la verdad nos susurran el amor comunitario del Dios Trinidad.
La mística trinitaria es el llamado a vivir integral y plenamente, es decir, reconocer la diversidad que está en nosotros y en toda vida.
El Dios-Trinidad es el en-amorado. El itinerario que nos lleva hacia la comunidad plena no es otra cosa que la vida en-amorada.