Para estimular a la iniciativa privada a colaborar en este acontecimiento La delegada del Gobierno pide la declaración del Año Santo de san Isidro como Acontecimiento de Excepcional Interés Público
La propuesta de Mercedes González, este jueves, 21 de abril, al ministro de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Félix Bolaños, supondría un estímulo para que la iniciativa privada colabore en este acontecimiento y las distintas actividades de esta celebración
Como señala la propia Delegación el Gobierno, el Año Santo de san Isidro «dota a Madrid de un nuevo atractivo cultural, turístico y económico en unos momentos económicamente difíciles
Según ha señalado la propia González, el ministro de la Presidencia «va a estudiar con interés la propuesta, la va a trasladar a la ministra de Hacienda y espera tener respuesta en un plazo breve»
La Delegación del Gobierno se ha comprometido con el Ejecutivo regional y el Ayuntamiento a impulsar esta declaración. El cardenal Carlos Osoro agradeció la implicación de las tres administraciones e incidió en que este es un 'año de gracia'
Según ha señalado la propia González, el ministro de la Presidencia «va a estudiar con interés la propuesta, la va a trasladar a la ministra de Hacienda y espera tener respuesta en un plazo breve»
La Delegación del Gobierno se ha comprometido con el Ejecutivo regional y el Ayuntamiento a impulsar esta declaración. El cardenal Carlos Osoro agradeció la implicación de las tres administraciones e incidió en que este es un 'año de gracia'
(Archimadrid).- La delegada del Gobierno en la Comunidad de Madrid, Mercedes González, ha propuesto este jueves, 21 de abril, al ministro de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Félix Bolaños, que el Gobierno impulse la declaración del Año Santo de san Isidro como Acontecimiento de Excepcional Interés Público durante el encuentro que ambos han mantenido en el complejo de la Moncloa.
La medida, que tendría que aprobarse en forma de proyecto de ley, supondría un estímulo para que la iniciativa privada colabore en este acontecimiento y las distintas actividades de esta celebración −exposiciones, espectáculos o conciertos−. Entre otras cosas, haría posible que las empresas que patrocinaran, donaran o financiaran actos del jubileo o su promoción y publicidad pudieran beneficiarse de importantes exenciones fiscales.
Como señala la propia Delegación el Gobierno en una nota en la que también se citan otros temas como los realojos de la Cañada Real, el Año Santo de san Isidro «dota a Madrid de un nuevo atractivo cultural, turístico y económicoen unos momentos económicamente difíciles por la crisis post COVID y la guerra de Ucrania». Según ha señalado la propia González, el ministro de la Presidencia «va a estudiar con interés la propuesta, la va a trasladar a la ministra de Hacienda y espera tener respuesta en un plazo breve».
En ejercicios anteriores, el Gobierno concedió este reconocimiento para el Año Xacobeo, el 400 aniversario de la plaza Mayor de Madrid, el IV centenario de la muerte de Cervantes, los 200 años del Teatro Real o el bicentenario del Museo del Prado.
Colaboración institucional
La Delegación del Gobierno se ha comprometido con el Ejecutivo regional y el Ayuntamiento a impulsar esta declaración, recogida también en la firma del protocolo de colaboración suscrito el pasado 4 de abril en la sala capitular de la catedral de Santa María la Real de la Almudena, entre el Arzobispado de Madrid y las tres administraciones, para la promoción y organización de diversas actividades con motivo de la declaración de Año Santo de san Isidro, concedido por la Santa Sede por el 400 aniversario de la canonización del patrón de Madrid.
En aquel acto, el arzobispo de Madrid, cardenal Carlos Osoro, agradeció la implicación de las tres administraciones e incidió en que este es un «año de gracia» no solo para la ciudad, sino también para tantos lugares del mundo en los que se venera a san Isidro. En este sentido, destacó que fue un hombre «sencillo, humilde, un trabajador del campo», un «santo de la puerta de al lado». Su vida es una llamada constante a no olvidar «que somos hermanos», abundó, y «el año jubilar ha de ser, para toda la Iglesia y para nosotros, una renovada invitación […] para aprender a vivir con altura de miras, como lo ha hecho siempre Madrid».
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