En el primer Congreso Nacional  de Filosofía desarrollado en Mendoza el 9/04/1949 donde Perón define sus ideales, afirma primeramente “Nuestra acción de gobierno no representa un partido político, sino un gran movimiento nacional con una doctrina propia, nueva en el mundo político mundial” se trata de una “filosofía de vida, simple, práctica, popular, profundamente cristiana e profundamente humana”.

Ya en aquel momento vislumbraba que “El hombre y la sociedad enfrentan la mayor crisis de valores ya registradas en su evolución” e igualmente “no puede existir un divorcio entre pensamiento y acción”.

Este pensamiento que parece simple es importante, el reconocido teólogo español José M. Castillo escribe en Religión Digital de 21 de Agosto (1) “Europa  ha fundido y confundido su asombrosa grandeza con su más repugnante miseria. Una fusión y una confusión que tienen sus raíces muy lejos y que, de diversas maneras y métodos distintos han llegado hasta nosotros. Este “limite sin límites”, en el que vivimos y del que ignoramos a donde nos lleva, es el resultado inevitable de un saber que haya sido infinitamente más “especulativo” que “práctico”. Europa ha laborado teorías asombrosas que han desembocado en prácticas aterradoras. Porque el divorcio- y hasta el enfrentamiento- entre el “saber” y “la experiencia” nos ha conducido a donde no podíamos imaginar”

Fundamentado en que esa situación se debía a que la mano de obra era barata-esclavos y débiles explotados - adiciona: “En efecto, Europa hizo un saber para los intelectuales, hizo un derecho para los poderosos. Hizo una religión, para los privilegiados. Así, y por eso, justificó el colonialismo, en África y América. Como justificó también la marginación de la mujer, el uso y abuso de los esclavos, la justificación de las desigualdades sociales, las guerras de religión, la tortura y la muerte de herejes, infieles y extranjeros  y hasta puso las bases que justificaron l capitalismo mucho antes que Marx, en los escolásticos tardíos, Antonio de Florencia y Bernardo de Siena, que permitieron “el beneficio del capital en cualquiera de sus formas“. 

De aquí que el gran fondo filosófico que es la verdad, hay prevalecido un obscurantismo de tendencias, de pequeñas tesis para sembrar el desconcierto.

En aquel momento ya sustentaba que el advenimiento de un materialismo práctico que produjo un notable progreso económico hizo, sin embargo, desaparecer en los individuos la exacta consciencia de sí mismos. El hombre había perdido la fe en las verdades fundamentales y era misión de la filosofía reinventar un camino humano.

En ese momento habla de la crisis del espíritu europeo, por la difusión del ateísmo laicista, que llevaron a la aplicación de las teorías de Darwin a las sociedades humanas, la competencia donde gana el más fuerte, que resultaron inadecuadas para la paz social, por no responder a la complejidad humana. Dice “Cuando llegamos a Darwin y sus conexiones con la filosofía, advertimos de pronto que estamos ya muy lejos del mundo de Sócrates para el cual el virtuoso era el obrero que entiende en su trabajo, por oposición al demagogoy al politiquero.

Este hecho demostraba la urgencia del reconocimiento de la verdadera esencia de la persona humana como base de la dignificación y el bienestar humano, recuperar la virtud, en el sentido Socrático-que es la realización perfecta de la vida-, o sea concreta y batalladora como la cristiana, que considera tentaciones y problemas. Opuesta a la idea de un bien meramente teórico y negativo para todo lo que es transitorio, y por eso humano. 

Como vemos es una visión “antropocéntrica” que la ve como un conjunto de relaciones con la trascendencia, con la propia realización, con los otros y con la naturaleza, conjunto de relaciones que articulan una política.

Se opone a resucitar las tradiciones muertas que llevaría a una actitud política reaccionaria y elitista, pues solo podría gobernar la élite que la conoce. Igualmente negaría la posibilidad histórica que aparezca la novedad y lo que está en el núcleo del peronismo: la fecundidad creadora del pueblo.

En las grandes crisis la opción que se elija es de enorme trascendencia porque decide la evolución histórica. El capitalismo liberal ha llevado a un hombre desorientado sino desquiciado, no despertando en el hombre la persuasión de su propio valer, de su dignidad. Por eso proveer solo a las necesidades materiales determina el materialismo que concibe al hombre como un animal más. La promoción material y la distribución de la riqueza no tienen sentido sin la previa promoción de la real dignidad humana.

De estas verdades fundamentales puede deducirse una norma, una pauta última que será la clave ´para la articulación del cuerpo social, de la organización de la comunidad.

Esta idea es opuesta a la visión tripartita  platónica: trabajadores, guerreros y filósofos, opuesta a la democracia ateniense en la cual la masa inconsciente estaba a merced de los demagogos, incapaces de perseguir el bien de la sociedad. Allí, prefigura su utopía: la comunidad organizada en base a la idea de justicia, por eso el movimiento se denominó “justicialismo”.

La comunidad organizada es una comunidad donde reina la paz social y donde la diferencia de funciones, acompañada por un sistema común de derechos y deberes, no se transforma en desigualdades, una comunidad donde es estimulada la solidaridad entre los individuos y donde las reivindicaciones especiales, son mantenidas dentro de sus límites para el bien de la comunidad.

Estas ideas se corresponden con las potenciadas en la segunda mitad del siglo XX por el Concilio Vaticano II,  por la encíclica Populorum Progressio, por el encuentro de Medellín, por Helder Cámara, por Theilard de Chardin, y muchos otros, que era: “amar a los seres humanos y las estructuras que contribuyen a que se realicen como hombres, y tratar de destruir o modificar las estructuras que les impiden su realización”.

Cual fue la respuesta del liberalismo oligárquico? Los liberales antes, y ahora los neoliberales, me refiero a los que tienen real poder, no a los pobres colonizados de nuestros países, tienen mucha experiencia en estas luchas e innumerables armas para ellas, una de las cuales es la lingüística. Así usan insidiosas ideas, dogmas de su sacra ideología, y siembran especialmente el “odio”, cuya germinación, como escribe Giardinelli (2): siempre es letal para los pueblos.

Ese odio que fue caracterizado por las paredes del Barrio Norte, sede y hábitat de la oligarquía más poderosa de Argentina, en los días que Eva Peón estaba muriendo por un cáncer, un cartel “viva el cáncer”, expresión del odio más cruel e inhumano a una mujer, que fue las más amada por los pobres y trabajadores 

Como el mismo Giardinelli describe en su artículo, ese odio a que en abril de l953 un atentado terrorista causara 7 muertos y un centenar de heridos en la Estación Plaza de Mayo del subterráneo en Bs. As. En Junio de 1955, aviones de la Marina de Guerra bombardearon plaza de Mayo produciendo 400 muertos, 30 de los cuales eran niños que viajaban en ómnibus escolares. Y un año después en Junio de 1956 después de una sublevación militar de apoyo al peronismo fueron fusilados, por primera vez, un General Juan José Valle, 15 militares y 18 civiles, sin juzgamiento previo, ni ley de pena de muerte en el país.

El peronismo fue proscripto en Argentina, durante 18 años no se permite el regreso del General Perón y hasta era prohibido mencionar su nombre, debía decirse el dictador prófugo. En ese tiempo toda la industrialización del país: que fabricaba tractores, rastrojeras, autos, motos y aviones fue siendo entregado por las políticas liberales y posteriormente neoliberales

Nace así la resistencia peronista que, después de 19 años llevaría nuevamente al General Perón al poder, pero ya anciano y agotado murió al año siguiente, dejando como sucesora a su esposa que no tenía la capacidad para gobernar un país conflictivo como Argentina.

 En esa resistencia debemos destacar la figura del Pe. Carlos Mugica, como un ejemplo que debemos seguir El, de una familia tradicional y de buena posición económica, se reconoce como antiperonista hasta los 26 años y que su proceso de acercamiento al peronismo ocurrió junto con su cristianización. Siguiendo a Juan XXIII que decía “la iglesia es de todos pero ante todo es de los pobres” y que seguir a Cristo es hacer como  Cristo lo que implica una opción concreta por ese hacer. Su opción fue por los pobres, los oprimidos, porque una cosa es mirar al peronismo desde los pobres y otra mirarlo desde la oligarquía.

Así, funda la Parroquia Cristo Obrero en la Villa 31, la villa miseria más conocida de Bs. As. Y afirma “la opción por los pobres, por el pueblo es la opción por el peronismo, pero no es cualquier peronismo, es el peronismo de los pobres. Piensa que la opción política siempre es por el mal menor, y afirma “siempre estoy eligiendo de esa manera porque el bien perfecto no existe. Jesús no nos reprueba por haber optado mal, salvo que sea por irresponsabilidad, o por falta de preparación. Jesús condena al que guardó el talento, al que no quiso arriesgar, al que no hizo nada por miedo a equivocarse.

Mujica se une al Movimiento de Sacerdotes por el Tercer Mundo y como comenta Alberto Sily(3), sociólogo, ex-padre “En nuestra sociedad, dentro de un sistema que aprisiona y dentro de una Iglesia institucionalmente cómplice no se tolera la renuncia publica a una clase social, ni la elección de la pobreza de vida y la convivencia con los pobres, y además de ´pobres que sean peronistas. No se tolera que en lugar de odiar se ame a ese pueblo”.

El Cardenal Aramburu. Arzobispo de Bs.As., no toleraba la oposición de Mugica al poder establecido: político, económico y eclesiástico, como también no que discutiese públicamente en la Universidad del Salvador, donde era profesor de Teología, con José A. Martinez de Hoz,  uno de los representantes más genuinos de la oligarquía porteña y del poder económico, que poco después fue el nefasto Ministro de Economía de la Dictadura Militar.   Carlos defendía, en su discusión, la encíclica Populorum Progressio. Como consecuencia tuvo 30 días de suspensión canónica aplicada por el cardenal Aramburu.

No le fue fácil, pero se manifestó contra toda violencia armada, junto a todos los sacerdotes para el tercer mundo, 13 días antes de que la violencia de la derecha lo asesinase el 11/03/1974. Sus restos descansan en la Parroquia de Cristo Obrero.

Los pobres, esos pobres peronistas, conservaron un gran fidelidad al peronismo, porque este tenía una filosofía de vida “simple, práctica, popular, profundamente cristiana y profundamente humana” como fue definida en la doctrina del justicialismo. De aquí que es conocido “que en la Argentina no se puede gobernar sin el peronismo”

De aquí, Perón dice en el Congreso Nacional de Filosofía de Mendoza, “Un Estado de justicia donde toda clase ejercita sus funciones en el servicio del todo y se aplica para que su virtud peculiar se eleve conforme su destino trascendente y sirva a la harmonía del todo. El todo aparece en el horizonte político Griego, que es el primer horizonte político de nuestra civilización, con toda una propuesta central de justicia con una ley de harmonía, como la del cuerpo humano que prevalece sobre las singularidades”.

Y continuo “El Cristianismo que constituyó la primera gran revolución y la primera liberación humana, podía corregir felizmente las concepciones griegas. Pero, esa corrección se aproximó de una gran contribución. Enriqueció la personalidad del hombre e hizo de la libertad, teórica y limitada hasta entonces, una posibilidad universal” y adicionó: “Lo que le falto a Grecia para la definición perfecta de la humanidad y del Estado, fue precisamente lo aportado por el cristianismo: su hombre vertical, eterno, imagen de Dios. De él se pasa ya a la familia, al hogar, su unidad se convierte en plasma  que a través de los municipios integrará los Estados, y sobre la que descansaran las modernas colectividades”.

De aquí, G. F. Benedini (4), del Centro Universitario Jorge Amado, Salvador, Brasil escriba “”Es a partir del Primer Congreso Nacional de Filosofía que la doctrina justicialista gana forma, como un justo equilibrio entre los extremos, tercera posición como sinónimo de justicialismo, que será representada como un punto en el centro de un arco en cuyos extremos están el individualismo capitalista y el colectivismo materialista, pero sobretodo como doctrina de justicia social que Perón considera la base de la democracia”.

1-(Castilo J.M. “Europa a fundido y confundido su asombrosa grandeza con su más repugnante miseria” Religión Digital 21/08/19)

2 -(Giardinelli M. “Acerca del neoliberalismo” Pag 12 l9/08/19)

3-(“Carlos Mugica e o sonho da revolução Argentina. Entrevista especial com D. Garcia, Pauls e Alberto Sily “ Instituto Humanitas Unisinos 13/10/2007)

4-(Benedini G.F. “Filosofía Peronista. ‘ As linhas ideológicas do justicialismo” Revista de História e Estudos Culturais, 2010, 7, 1-21)