2.2. El concilio como cuerpo doctrinal
2.2.1 Lo logrado en los Documentos conciliares
Igualmente útil y funcional para este estudio encontramos otra síntesis, que presenta en pocos párrafos la estructura y contenidos esenciales de los documentos del Concilio Vaticano II, en la
misma página web anteriormente citada.
“Los 16 Documentos del Concilio Vaticano II:
Cuatro Constituciones. [Constitución: es un documento que posee un valor teológico o doctrinal permanente].
A ) Constitución dogmática sobre La Iglesia, "Cristo, Luz de las naciones". "Lumen Gentium". (LG)
B) Constitución sobre la Sagrada Liturgia: Sacrosantum Concilium. (SC)
C) Constitución pastoral sobre la Iglesia en el mundo actual. "Schema XIII" - Gaudium et spes. (GS)
D) Constitución sobre la Divina Revelación: Dei Verbum (DV)
Los nueve decretos. [Decreto: es una decisión o un conjunto de decisiones que tienen un alcance práctico normativo o disciplinar].
A) La actividad misionera de la Iglesia: “Ad gentes” (AG)
B) Vida y ministerio de los sacerdotes: “Presbiterorum ordinis” (PO)
C) Renovación de la vida religiosa: “Perfectae caritatis” (PC)
D) La misión de los obispos: “Christus Dominus” (CD)
E) Formación de los sacerdotes: “Optatam totius” (OT)
F) Apostolado de los seglares. "Apostolicam actuositatem” (AA)
G) Los medios de comunicación social: “Inter mirifica” (IM)
H) Las Iglesias Orientales Católicas: “Orientalium Ecclesiarum” (OE)
I) El ecumenismo. "Unitatis Redintegratio” (UR)
Las tres declaraciones [Declaración: es la expresión de una etapa en la investigación y la aclaración].
A) La libertad religiosa: “Dignitatis humanae” (DH)
B) La educación cristiana: “Gravissimum educationis” (GE)
C) Las relaciones de la Iglesia con las religiones no – cristianas: “Nostra aetate” (NAe)
2.2.2. La forma de hablar del Concilio
Si bien se puede hablar de “cuerpo doctrinal” al referirse al conjunto de los documentos elaborados por el Concilio Vaticano II, es necesario hablar de la característica especial del lenguaje allí utilizado. Inspirándose en G. Routier y en J. O’Malley, historiador de la Iglesia, Joaquín Perea, en el artículo más arriba citado, resume este aspecto de la siguiente manera:
El Vaticano II utiliza en sus 16 documentos un género literario nuevo en la tradición conciliar. Este dato es crucial para comprender lo que suce¬dió en el Concilio. Forma y contenido no pueden separarse. El Concilio adoptó un nuevo estilo de discurso y al actuar así por medio de este esti¬lo manifestó una enseñanza relevante sobre cómo ha de ser la Iglesia. Ese género puede ser identificado con precisión… Es el panegírico, que es la pintura de un retrato idealizado con objeto de excitar la admiración y apropiación…
O’Malley hace un estudio exhaustivo de las palabras que utiliza en Con¬cilio. En primer lugar, ¿qué clase de palabras están ausentes? Palabras de alienación, exclusión, enemistad, amenaza, intimidación, vigilancia, castigo. En segundo lugar, ¿qué clase de palabras están presentes? Palabras nue¬vas en el vocabulario conciliar o, al menos, atípicas en él….
Recapitulemos brevemente algunos elementos característicos de ese vocabulario. Los que señalan las relaciones horizontales en la Iglesia (“hermanos y hermanas”), en contraste con la visión vertical de los con¬cilios anteriores. Entre las palabras horizontales, las que indican recipro¬cidad: cooperación, colaboración, asociación. En esta categoría de hori¬zontalidad o reciprocidad, las dos palabras más significativas son: diálogo y colegialidad.
Estrechamente relacionadas con las palabras de reciprocidad están las palabras de amistad. La más llamativa es la palabra inclusiva de todos: “familia humana”. De manera semejante, las palabras de humildad, empe¬zando por la descripción de la Iglesia como peregrina.
Otra notable característica del vocabulario del Concilio es el uso del término “cambio”. Desde el primer párrafo de su primer documento mutatio aparece muchas veces, en casos con otros términos que siempre indi¬can cambio, como “desarrollo”, “progreso”, e incluso “evolución”. La pala¬bra de cambio más familiar es la de aggiornamento…, cuyo sentido ya hemos explicado.
Es este un resumen de alguno de los elementos en el cambio de estilo de la Iglesia indicados en el vocabulario del Concilio: de los mandatos a las invitaciones, de las leyes a los ideales, de las amenazas a la persua¬sión, de la coerción a la conciencia, del monólogo a la conversación, del mandar al servir, de lo separado a lo integrado, de lo vertical a lo horizontal, de la exclusión a la inclusión, de la hostilidad a la amistad, de lo estático a lo cambiante, de la aceptación pasiva al compromiso activo, de lo definido a lo abierto, de la modificación de conducta a la conversión del corazón, de los dictados de la ley a los dictados de la conciencia, de la conformidad externa a la búsqueda gozosa de la santidad.
Guía para la lectura personal y diálogo en grupo:
A) Anoto aquello que me llama la atención o preciso de mayor clarificación…
B) Trato de responder algunas cuestiones:
1) Leyendo los títulos de los 16 documentos conciliares crees que se asumieron los desafíos, inquietudes que el mundo y la iglesia de entonces o quedaron algunas, que consideras importantes para la época y no se afrontaron ¿cuáles?
2) Haciendo la lectura de los 16 documentos desde el mundo e Iglesia actual, qué que cuestiones tendría que afrontar…
3) Qué piensas de los paradigmas globales que se indican, ¿te parecen que están todos o falta alguno entonces? ¿y si los miramos desde hoy?
4) Para los cambios de paradigmas, en cada una de las cuatro Constituciones, trata de responder estas cuestiones:
a) ¿Qué dice el texto y cuál es el núcleo del mensaje?
b) ¿En qué medida el mensaje responde a la situación social, cultural, religiosa de aquel tiempo…?
c) ¿Qué me dice a mi hoy en el contexto social, cultural y religioso actual?
d) ¿Qué nos dice como miembros del Grupo Promotor?
Igualmente útil y funcional para este estudio encontramos otra síntesis, que presenta en pocos párrafos la estructura y contenidos esenciales de los documentos del Concilio Vaticano II, en la
“Los 16 Documentos del Concilio Vaticano II:
Cuatro Constituciones. [Constitución: es un documento que posee un valor teológico o doctrinal permanente].
A ) Constitución dogmática sobre La Iglesia, "Cristo, Luz de las naciones". "Lumen Gentium". (LG)
B) Constitución sobre la Sagrada Liturgia: Sacrosantum Concilium. (SC)
C) Constitución pastoral sobre la Iglesia en el mundo actual. "Schema XIII" - Gaudium et spes. (GS)
D) Constitución sobre la Divina Revelación: Dei Verbum (DV)
Los nueve decretos. [Decreto: es una decisión o un conjunto de decisiones que tienen un alcance práctico normativo o disciplinar].
A) La actividad misionera de la Iglesia: “Ad gentes” (AG)
B) Vida y ministerio de los sacerdotes: “Presbiterorum ordinis” (PO)
C) Renovación de la vida religiosa: “Perfectae caritatis” (PC)
D) La misión de los obispos: “Christus Dominus” (CD)
E) Formación de los sacerdotes: “Optatam totius” (OT)
F) Apostolado de los seglares. "Apostolicam actuositatem” (AA)
G) Los medios de comunicación social: “Inter mirifica” (IM)
H) Las Iglesias Orientales Católicas: “Orientalium Ecclesiarum” (OE)
I) El ecumenismo. "Unitatis Redintegratio” (UR)
Las tres declaraciones [Declaración: es la expresión de una etapa en la investigación y la aclaración].
A) La libertad religiosa: “Dignitatis humanae” (DH)
B) La educación cristiana: “Gravissimum educationis” (GE)
C) Las relaciones de la Iglesia con las religiones no – cristianas: “Nostra aetate” (NAe)
2.2.2. La forma de hablar del Concilio
Si bien se puede hablar de “cuerpo doctrinal” al referirse al conjunto de los documentos elaborados por el Concilio Vaticano II, es necesario hablar de la característica especial del lenguaje allí utilizado. Inspirándose en G. Routier y en J. O’Malley, historiador de la Iglesia, Joaquín Perea, en el artículo más arriba citado, resume este aspecto de la siguiente manera:
El Vaticano II utiliza en sus 16 documentos un género literario nuevo en la tradición conciliar. Este dato es crucial para comprender lo que suce¬dió en el Concilio. Forma y contenido no pueden separarse. El Concilio adoptó un nuevo estilo de discurso y al actuar así por medio de este esti¬lo manifestó una enseñanza relevante sobre cómo ha de ser la Iglesia. Ese género puede ser identificado con precisión… Es el panegírico, que es la pintura de un retrato idealizado con objeto de excitar la admiración y apropiación…
O’Malley hace un estudio exhaustivo de las palabras que utiliza en Con¬cilio. En primer lugar, ¿qué clase de palabras están ausentes? Palabras de alienación, exclusión, enemistad, amenaza, intimidación, vigilancia, castigo. En segundo lugar, ¿qué clase de palabras están presentes? Palabras nue¬vas en el vocabulario conciliar o, al menos, atípicas en él….
Recapitulemos brevemente algunos elementos característicos de ese vocabulario. Los que señalan las relaciones horizontales en la Iglesia (“hermanos y hermanas”), en contraste con la visión vertical de los con¬cilios anteriores. Entre las palabras horizontales, las que indican recipro¬cidad: cooperación, colaboración, asociación. En esta categoría de hori¬zontalidad o reciprocidad, las dos palabras más significativas son: diálogo y colegialidad.
Estrechamente relacionadas con las palabras de reciprocidad están las palabras de amistad. La más llamativa es la palabra inclusiva de todos: “familia humana”. De manera semejante, las palabras de humildad, empe¬zando por la descripción de la Iglesia como peregrina.
Otra notable característica del vocabulario del Concilio es el uso del término “cambio”. Desde el primer párrafo de su primer documento mutatio aparece muchas veces, en casos con otros términos que siempre indi¬can cambio, como “desarrollo”, “progreso”, e incluso “evolución”. La pala¬bra de cambio más familiar es la de aggiornamento…, cuyo sentido ya hemos explicado.
Es este un resumen de alguno de los elementos en el cambio de estilo de la Iglesia indicados en el vocabulario del Concilio: de los mandatos a las invitaciones, de las leyes a los ideales, de las amenazas a la persua¬sión, de la coerción a la conciencia, del monólogo a la conversación, del mandar al servir, de lo separado a lo integrado, de lo vertical a lo horizontal, de la exclusión a la inclusión, de la hostilidad a la amistad, de lo estático a lo cambiante, de la aceptación pasiva al compromiso activo, de lo definido a lo abierto, de la modificación de conducta a la conversión del corazón, de los dictados de la ley a los dictados de la conciencia, de la conformidad externa a la búsqueda gozosa de la santidad.
Guía para la lectura personal y diálogo en grupo:
A) Anoto aquello que me llama la atención o preciso de mayor clarificación…
B) Trato de responder algunas cuestiones:
1) Leyendo los títulos de los 16 documentos conciliares crees que se asumieron los desafíos, inquietudes que el mundo y la iglesia de entonces o quedaron algunas, que consideras importantes para la época y no se afrontaron ¿cuáles?
2) Haciendo la lectura de los 16 documentos desde el mundo e Iglesia actual, qué que cuestiones tendría que afrontar…
3) Qué piensas de los paradigmas globales que se indican, ¿te parecen que están todos o falta alguno entonces? ¿y si los miramos desde hoy?
4) Para los cambios de paradigmas, en cada una de las cuatro Constituciones, trata de responder estas cuestiones:
a) ¿Qué dice el texto y cuál es el núcleo del mensaje?
b) ¿En qué medida el mensaje responde a la situación social, cultural, religiosa de aquel tiempo…?
c) ¿Qué me dice a mi hoy en el contexto social, cultural y religioso actual?
d) ¿Qué nos dice como miembros del Grupo Promotor?