Este jueves, 5 de enero, Italia pondrá sus banderas a media asta en señal de luto durante el funeral del papa emérito Benedicto XVI, que será presidido por Francisco en la plaza de San Pedro del Vaticano ante miles de fieles y autoridades italianas y europeas a partir de las 9:30 de la mañana.
Entre esas autoridades se encuentra el presidente de Portugal, el conservador Marcelo Rebelo de Sousa, quien ha declarado un día de luto nacional por la muerte del papa emérito para este jueves.
Unos 60.000 asistentes
Mientras tanto, el Vaticano no declarará las "novendiales", el periodo de luto de nueve días que tradicionalmente sigue a la muerte de un pontífice, ya que el papa reinante, Francisco, sigue vivo y Benedicto XVI renunció a su ministerio en 2013
Se espera que la afluencia de público al funeral sea menor que en el de Juan Pablo II. Si entonces, en abril de 2005, unas 300.000 personas abarrotaron la emblemática plaza y sus alrededores, ahora se calcula que podrían estar en torno a los 60.000 asistentes.
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