El patriarca Bartolomé firma una tribuna a favor de la exhortación El cardenal Turkson llama a un debate público sobre "Amoris laetitia"
(Cameron Doody).- "Algo que sería bueno es ponerlos a todos en un escenario". El cardenal Peter Turkson ha llamado así a un debate público entre detractores y defensores de la Amoris laetitia, mientras el patriarca Bartolomé ha salido en defensa de la exhortación apostólica de Francisco, elogiando su discernimiento perspicaz de "una espiritualidad de matrimonio y familia para el mundo de hoy".
En declaraciones al National Catholic Register, el cardenal Turkson, Prefecto del nuevo Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral, rememoró las diferentes intervenciones en la controversia sobre el escrito La alegría del amor. Éstas han pasado por las dubia de los cuatro cardenales reaccionarios haata la defensa del propio Papa Francisco, que ha insistido, en una nueva entrevista con la revista belga Tertio, en que todo lo que está en su exhortación "fue aprobado por más de dos tercios de los padres" presentes en los sínodos sobre la familia de 2014 y 2015.
"Todos los que han dicho cosas, escrito cosas, cada uno en su contexto diferente, algo que sería bueno es ponerlos a todos en un escenario", afirmó el cardenal ghanés al portal estadounidense. El purpurado también lamentó la polémica sobre el escrito que sigue propagándose en diferentes rincones en internet y en la prensa escrita.
"Probablemente podríamos encontrar una manera de hacerlo para que no se convierta en una guerra en los medios", dijo Turkson, refiriéndose a la sentida discusión a la que el documento papal ha dado lugar. "Si no lo resolvemos, y si recurrimos a los medios para solucionar este tipo de cosas, nos quita la libertad de discutirlo todo libremente", recalcó.
Por su parte Bartolomé, el patriarca de Constantinopla, firmó la semana pasada también una tribuna en L'Osservatore Romano en la que recordó cómo Amoris laetitia"toca el corazón del amor y de la familia".
"Es importante observar", escribió Bartolomé, "que Amoris laetitia recuerda primero y sobre todo la misericordia y la compasión de Dios, más que únicamente las reglas morales y reglamentos canónicos de los hombres".
"Lo que sin duda ha sofocado y obstaculizado a la gente en el pasado", continuó la máxima autoridad de la Iglesia ortodoxa, "es el temor de que un "padre celestial" de alguna manera dicta la conducta humana y prescribe la costumbre humana": algo que, aseveró, no puede estar más lejos de la verdad.
"Los líderes religiosos son llamados a recordar y, a su vez, a hacer recordar que Dios es vida, amor y luz": algo que se empeña en hacer el Papa en su exhortación, documento que tan sagazmente discierne "la experiencia y los retos de la sociedad contemporánea" en aras de "una espiritualidad de matrimonio y familia para el mundo de hoy".
Al abrazar las familias del mundo de las que tiene cargo, concluyó el patriarca, Francisco no solo "ha invocado la caridad infinita y compasión incondicional del Dios viviente sobre las almas más vulnerables", sino que ha invitado a todos "a asumir una responsabilidad personal de su salvación al buscar maneras en las que pueden cumplir con los mandamientos divinos y madurar en el amor espiritual".