El paraguayo Adalberto Martínez se sumó este domingo al clamor mundial El nuevo arzobispo de Asunción pide corredores humanitarios en Ucrania
El prelado, que asumió este domingo, en su primera homilía como arzobispo de la capital paraguaya, pidió orar por los pueblos de Ucrania y de Rusia, "que están en guerra, con todo el sufrimiento, dolor y muerte que eso implica"
En su primer mensaje, Martínez subrayó que Paraguay "necesita con urgencia signos de esperanza" en un momento en que "el crimen organizado ha permeado y corrompido gran parte del tejido social, político, económico y hasta religioso" del país
Pidió un diálogo en busca de "soluciones pacíficas" al problema de la tenencia y propiedad de la tierra en el país y a la situación de las comunidades indígenas y campesinas "bajo amenaza de desalojos"
Pidió un diálogo en busca de "soluciones pacíficas" al problema de la tenencia y propiedad de la tierra en el país y a la situación de las comunidades indígenas y campesinas "bajo amenaza de desalojos"
| RD/EFE
El nuevo arzobispo de Asunción, Adalberto Martínez, se sumó este domingo al clamor para que se abran corredores humanitarios para "salvar vidas" en medio de la guerra en Ucrania.
En su primera homilía como arzobispo de la capital paraguaya, Martínez pidió orar por los pueblos de Ucrania y de Rusia, "que están en guerra, con todo el sufrimiento, dolor y muerte que eso implica".
El jerarca invitó además a no olvidarse del llamado que el papa Francisco formuló en esta jornada a favor de unos "corredores humanitarios para salvar vidas".
Martínez asumió este domingo como el séptimo arzobispo de la capital paraguaya en una ceremonia celebrada en la Catedral Metropolitana de Asunción.
Fue designado por el sumo pontífice el pasado 17 de febrero, en reemplazo del hasta ahora arzobispo de esta capital Edmundo Valenzuela Mellid.
En su primer mensaje, Martínez subrayó que Paraguay "necesita con urgencia signos de esperanza" de quienes tienen una responsabilidad ante la sociedad e indicó que la Iglesia católica "no puede defraudar la gran confianza" de la ciudadanía.
Señaló que la misión que asume hoy coincide con un momento en que "el crimen organizado ha permeado y corrompido gran parte del tejido social, político, económico y hasta religioso" del país.
Igualmente, dijo que se "ciernen en el horizonte negros nubarrones de inestabilidad política y social" a raíz de la "inequidad estructural y el grave deterioro de las condiciones de vida de los sectores más vulnerables y de la propia clase media", que atribuyó a la falta de políticas públicas orientadas al bien común, a la corrupción, la impunidad e incluso a factores climáticos.
Monseñor Adalberto Martínez sostuvo que el crimen organizado ha corrompido el tejido social, político y económicohttps://t.co/3qGBJdzfp9
— Diario HOY Paraguay (@hoypy) March 6, 2022
De igual forma, pidió un diálogo en busca de "soluciones pacíficas" al problema de la tenencia y propiedad de la tierra en el país y a la situación de las comunidades indígenas y campesinas "bajo amenaza de desalojos".
El nuevo jerarca nació en Asunción el 8 de julio de 1951.
Se licenció en Teología en la Universidad Pontificia Lateranense de Roma y fue ordenado sacerdote el 24 de agosto de 1985. En la diócesis estadounidense de Virgin Islands ejerció entre durante varios años el ministerio de formación de seminaristas y asistente de movimientos apostólicos.
A lo largo de su trayectoria como religioso ha sido vicario parroquial, párroco, secretario general del Sínodo Diocesano y asesor pastoral de Radio Cáritas y de la Pastoral juvenil. El 15 de agosto de 1997 fue nombrado obispo auxiliar de Asunción y recibió la consagración episcopal el 8 de noviembre de ese mismo año. El 18 de mayo de 2000 fue designado primer obispo de la nueva diócesis de San Lorenzo y el 14 de marzo de 2012, "ordinario militare" de Paraguay.