La Universidad Católica de Lyon acoge las jornadas sobre la emergencia ecológica Francisco llama a la cohesión en su mensaje a las Semanas Sociales en Francia

Inundaciones en la región francesa de Nord-Pas-de-Calais
Inundaciones en la región francesa de Nord-Pas-de-Calais

Las Semanas Sociales se inauguran este viernes en la Universidad Católica de Lyon bajo el tema de la emergencia ecológica

En un mensaje firmado por el cardenal secretario de Estado de su Santidad, el Papa anima a los participantes a apoyar a la Iglesia en Francia y a la humanidad en un momento en que "el mundo que nos acoge se desmorona y quizás se acerca a un punto de ruptura"

La crisis climática exige un compromiso personal y colectivo para iniciar "un proceso nuevo, radical e intenso"

(Vatican News).- Tres días de trabajo comienzan este viernes por la tarde en la Universidad Católica de Lyon, reuniendo a representantes electos, investigadores, ingenieros, industriales y líderes religiosos, todos comprometidos en hacer frente a la "emergencia ecológica", tema de estas Semanas Sociales de Francia 2023. El cardenal secretario de Estado les ha enviado esta mañana un mensaje, transmitiéndoles el "caluroso" saludo del Papa Francisco.

"Su encuentro se celebra este año con el telón de fondo de una situación de inestabilidad internacional muy preocupante, que, también en Francia, pone de manifiesto la necesidad de cohesión social, fraternidad y reconciliación entre grupos y comunidades", afirma el cardenal Pietro Parolin en su preámbulo en nombre del Santo Padre. También subraya la "relevancia", en este contexto, de la ecología integral, según el magisterio del Papa.

La necesidad de una doble movilización

Ya en el 2015, en laLaudato si', Francisco pidió que se escuchara el grito de la tierra y de los pobres, proponiendo el principio de la ecología integral, que aborda simultáneamente la crisis social y ambiental y "nos insta a no separar lo que está íntimamente ligado".

Ocho años más tarde, en laLaudate Deum, el Papa retoma la misma urgencia: "Nuestras reacciones son insuficientes en un momento en que el mundo que nos acoge se desmorona y se acerca quizás a un punto de ruptura" (n. 2). Constata que el compromiso personal, "esencial a la vida cristiana", no es suficiente y considera necesario "iniciar un nuevo proceso radical e intenso que cuente con el compromiso de todos" (n. 59). Esto debe implicar tanto "la política como la movilización "desde abajo" de los diversos actores sociales y organismos intermediarios".

El autor de Fratelli tutti, que aboga por construir una sociedad impulsada por sentimientos de amistad y fraternidad, nos invita a explorar nuevas formas de cooperación.

En su encíclica, el Papa se felicita – precisa el mensaje – de que "muchos grupos y organizaciones de la sociedad civil contribuyan a superar las debilidades de la comunidad internacional, su falta de coordinación en situaciones complejas y su falta de vigilancia con respecto a los derechos humanos fundamentales" (ibid., n. 37). Es una forma de hacer un llamamiento a la colaboración efectiva y a la advertencia por parte de los actores sobre el terreno.

La fe nos vincula más profundamente al destino de la humanidad

El 2 de diciembre, el Papa viajará a Dubái para la COP28, "testimonio de su compromiso" para animar a todos los católicos a movilizarse "con clarividencia y determinación en el ámbito social". En efecto, prosigue el mensaje, "la fe no separa, sino que vincula más profundamente a los discípulos del Señor al destino de la humanidad, de todos los seres vivos y de la casa común".

Por último, el Papa anima a los participantes en las Semanas Sociales 2023 a apoyar a la Iglesia en Francia en su misión, ya que tienen "una visión de las realidades contemporáneas, enriquecida por la convergencia de diferentes competencias y perspectivas".

También les recuerda la novedad radicaldel Señor que "brilla particularmente entre los pobres, lejos de la lógica del poder, donde el Reino de Dios ya está cambiando las mentes y los corazones y preparando nuestro futuro". De ahí que el Papa espere que su esperanza sea también radical.

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