Tratando de trazar una línea con tres puntos de referencia en relación con el tema de la reforma de la curia romana deseada y preconizada por el P. Ricardo Lombardi, un primer punto lo encontramos ya en 1948 en el proyecto pedido por Pío XII. El segundo punto está en el libro “La hora del Concilio” preparado para ser entregado el día de la apertura del Concilio Vaticano II, pero luego recogido por orden del General de los Jesuitas ante las crítica aparecidas en L’Osservatore Romano. En los dos casos, la voz cantante era el P. Ricardo Lombardi, pero su voz no fue escuchada. Hasta hoy sigue siendo un tema aplazado. El tercer punto lo encontramos en una novela ficción titulada “Vaticano 2035” cuyo autor, -que se presenta bajo el pseudónimo Mons. Pietro de Paoli- coloca como protagonista a un personaje Lombardi: Giuseppe Lombardi.

Justamente en el contexto de un diálogo realizado con el P. Federico Lombardi, sj, Director de la Radio Vaticana y Vocero del Vaticano, sobrino del P. Ricardo, en ocasión de la Convivencia internacional del Grupo promotor Movimiento por un Mundo Mejor, el Director General del Movimiento, P. Fidel Suárez le hizo esta pregunta: “¿Conoce por casualidad el libro Vaticano 2035?” Su respuesta fue: no. “¿Quisiera saber en breve el argumento?” Ciertamente, respondió. Y con calma escuchó la síntesis de esta novela como aparece las cubiertas del libro en mención:
“Monseñor Pietro de Paoli, secretario, guarda espaldas y hombre de confianza de Tomas I, el pontífice en 2035, reconstruye para los lectores la vida apasionante de un papa reformista y transgresor que revolucionará la Iglesia católica.
A lo largo de una narración que transcurre a ritmo vertiginoso, el joven ingeniero italiano Giuseppe Lombardi se convierte en uno de los primeros sacerdotes casados y con hijos… y se alinea en la tendencia reformista de su mentor, el papa francés Silvestre el Grande. El Vaticano se convierte en escenario de la lucha entre los sectores conservadores y la nueva tendencia progresista, y se urden complots mientras avanza el fundamentalismo cristiano e islámico en el planeta. Por otro lado, el orden político mundial está sometido a fuerte tensiones… La paz entre palestinos e israelíes y la conversión de Jerusalén en una ciudad abierta podría lograrlo, y el entonces cardenal Lombardi es el llamado a impulsarla.
Cuando el papa Silvestre cae asesinado en un atentado, Giuseppe se convierte en su heredero natural. Como papa, Tomás I deberá enfrentarse a los retos más insospechados para conseguir la nueva Iglesia que ha soñado, pero también a los peligros más grandes en un mundo dominado por la furia del terrorismo y la intransigencia.
Una provocadora ficción que imaginaba la evolución de la Iglesia católica y del mundo a corto plazo, y que sueña con una Iglesia a la altura de los retos de su tiempo. Una mirada inquietante y al tiempo esperanzadora sobre nuestro futuro, que revela a su autor como un gran conocedor de los entresijos de la Iglesia y un sagaz analista de las posibilidades de un mundo en ebullición”.

“¿Se podría pensar –pregunta Fidel Suárez al P. F. Lombardi- que siendo el protagonista un Lombardi presumiblemente el autor lo hizo pensando tanto en el P. Ricardo como en usted, P. Federico, ahora muy allegado a la Curia Vaticana, con la intención de que la deseada reforma de la Curia Vaticana se haga realidad algún día gracias a las intuiciones de su Tío y a su actuación desde dentro?” Su respuesta inmediata fue: “No. La Iglesia va paso a paso…” Pero luego se quedó pensando un poco y prosiguió: “Bueno. Recientemente tuve que volver a leer documentos de mi Tío para aportar a un programa que preparó la RAI sobre la personalidad del P. Ricardo y su incidencia en la historia de Italia. Y es verdad que son necesarios los sueños, los ideales, los planteamientos de futuro para desde allí, confrontándolos con el presente, se vaya dando la renovación de la Iglesia”.