Atencia 6. CUATRO POEMAS CON ALMA
DÉJAME UNA PRESTANCIA
QUE DEMORE A LA MUERTE
Irene Mochi, esposa de Jorge Guillén, así celebraba la singularidad de nuestra poeta: “Era estupenda, y lo es todavía: alta, guapa, clara, de sonriente y dulce mirada a través de unos ojos que son flores. Llevaba una cabeza de diosa, tenía un porte altivo...” En el poema “Si la belleza”, que hemos recogido de “Marta y María”, consciente de sus cualidades literarias y, ¿por qué no?, también de su apariencia física, compone estos breves y sinceros versos acerca de la decadencia que habrá de sobrevenirla con los años. Con voz serena, pero elegante y verdadera, suplica una vejez ennoblecida por el amor, el gozo y la prestancia...
SI LA BELLEZA
Si la belleza debe ceder en su frescura
no dejes que se extinga en mí su poderío,
pues si di preferencia a otros dones, no tuve
en menosprecio el alto valor de tus obsequios:
la posible hermosura de que tú me colmaste
o que así parecía a quien más que a mí quise,
porque me concediste gozar crecidamente
de apasionado amor, con exceso llenando
el jarro que dispuesto llevé para la cita.
Resquebrajado el barro, sin lañas ni remiendos,
déjame una prestancia que demore a la muerte.
MÍNIMA ENTRE MASTRANZOS Y PÁJAROS Y ARROYOS
Poeta intimista, en “La pared contigua” (Hiperion, 1989) abre el oído y el corazón la sensible escritora malagueña a los sonidos, a las señales de vida que le llegan del otro lado de la habitación vecinal. Escucha, se asoma al exterior y se asombra. Pasea por el barrio y observa, y responde y ayuda. Un 4 de octubre de 1987, festividad de san Francisco de Asís, anotará en su diario lírico cuánto le apetecería salir a pasear al campo a disfrutar de la naturaleza, imaginándose “poverella” de la familia franciscana...
4 DE OCTUBRE
Si mi ejercicio fuese deletrear tu nombre
también caminaría -poverella- por los camposcantando,
solar y abierta, hermana de tu goce y el mío,
mínima entre mastranzos y pajaros y arroyos,
libre y sin que me arredre o disponga de mí
–hoy, 4 de octubre del 87–
este viento de otoño que me amarra a la casa.
NO VOLVIMOS EL ROSTRO. EMPRENDIMOS LA MARCHA...
También en "La pared contigua" encontramos el extraordinario poema "La marcha". Sin palabras, sin jefe. Solo se escuchó una voz interior, sintió cada uno con urgencia una necesidad sagrada... Me pregunto si acaso habrá sucedido algo así en el Éxodo bíblico, en el Pentecostés de fuego, el Vaticano II, la elección del Papa Francisco...
LA MARCHA
Éramos gentes hechas al don de mansedumbre
y a la vaga memoria de un camino a algún sitio.
Y nadie dio la orden. -Quién sabría su instante-.
Pero todos, a un tiempo y en silencio, dejamos
el cobijo usual, el encendido fuego que al fin seextinguiría,
las herramientas dóciles al uso por las manos,
el cereal crecido, las palabras a medio, el aguaderramándose.
No hubo señal alguna. Nos pusimos en pie.
No volvimos el rostro. Emprendimos la marcha.
REPOSA TU FATIGA UN MOMENTO EN LA CASA
En 1978 da a conocer María Victoria Atencia “El mundo de M. V.“ El poema presente, “Suceso”, me parece muy representativo de su lírica. Se presenta la escritora, muy “marta”, muy activa en su papel de madre y esposa (aunque también se sugiere la ensoñación “maría”: “y se me quedó fija / en un punto brillante del quinqué la mirada”). Súbitamente, irrumpe en su habitación una ruidosa paloma.
Fervorosa devota del santo que predicaba a los animales, invita María Victoria a reposar al ave, y a regresar de nuevo a su familia, que la echará de menos... Lo más interesante de este poema es su primer verso: “¿Quién desvía tu vuelo y me desea ahora?” Acostumbra Victoria a dar sentido providencialista a los sucesos del día a día. Esta paloma que irrumpe la habrá enviado su amante esposo, queriendo expresar así que se acuerda de ella, que la desea... (No creo que haya que excluir la posible sospecha de intervención de otro amor más alto...)
SUCESO
¿Quién desvía tu vuelo y me desea ahora?
Estaba yo ocupándome de la compra, el teléfono,
la ropa de los niños, y se me quedó fija
en un punto brillante del quinqué la mirada
cuando tú prorrumpiste "si a tu ventana llega...",
con un ronco zureo y súbito aletazo.
Reposa tu fatiga un momento en la casa
mientras hierve en colores la pluma de tu cuello,
y echa luego a volar y vuelve con los tuyos
al trigo de los muelles y al agua de los parques,
donde a tu desolada pareja, por tu ausencia,
el celo le contrae la encendida pupila.
MARÍA VICTORIA ATENCIA
Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana
0.Primera poeta española que gana el Reina Sofía
SAZÓN
PIEDAD RONDANINI
1.Trances de Nuestra Señora 1
NUESTRA SEÑORA ENCINTA
PLENITUD
LOS ANIMALES
2.Trances de Nuestra Señora 2
VICTORIA
LA LUZ
EL HUECO
3.Trances de Nuestra Señora y3
LA MANO
PORTAL
EL VIENTO
4.Letanías a la Virgen y Epitafio para una muchacha
LETANÍAS DE NTRA. SEÑORA EN LA NOCHE DE NAVID.
EPITAFIO PARA UNA MUCHACHA
5.Marta & María
SAN JUAN
LA MONEDA
MARTA Y MARÍA
6.Cuatro poemas con alma
LA BELLEZA
4 DE OCTUBRE
LA MARCHA
SUCESO
7.Tres poemas con niños
EL AMOR
EPITAFIO
POEMA PARA LOS DIEZ AÑOS DE UNA NIÑA