Nosotros los mayores, y la Poesía 17. NOS RECETAN A LAS MUJERES LA VEJEZ PREMATURA

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Cuando el ser humano vivía no mucho más allá de 50 años, el sentido último de la sexualidad eran los hijos. Retirada su regla, intuía la mujer que se cerraba para ella el ciclo de la fertilidad y, por tanto, la razón última de su actividad genital. Tampoco me parece que la iglesia ayudara mucho a pensar de otra manera. Ante todo, hemos de afirmar que, hoy en día, una mujer, ya sin la regla, debería sentirse muy gozosa por el futuro, también erótico, que un probable tercio último de vida podría regalarle.

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Me gustaría, a partir de aquí, sentirme acompañado por mi buen amigo dominico Cosme Puerto. En su ensayo El sexo no tiene edad. Cómo aman las personas mayores”, Temas de Hoy, 1995, podemos leer, refiriéndose al nuevo tiempo que se abre tras la menopausia: “En esta nueva etapa femenina, la vida sexual hasta puede mejorar. Incluso suele ocurrir que la mujer no descubra el orgasmo hasta esta etapa, lo que demuestra que el deseo erótico permanece más allá de la desaparición de las reglas y que el bloqueo obedece a razones de tipo cultural y social. Algunas superan el miedo a la reproducción y comienzan a gozar, sin tensiones, de su mundo erótico...”

La menopausia no es el final de la sexualidad para la mujer.
Todo lo contrario, el erotismo de lo que se comienza a llamar época otoñales una realidad de goces infinitos, largamente prolongados, que solo la experiencia acumulada durante el ardoroso período de la juventud puede lograr. Un deseo lento, suave, que se cuela por todos los rincones del cuerpo; una excitación larga y prolongada, como el más delicioso de los juegos, y un orgasmo profundo y de una intensidad tal que ninguna mente juvenil podría imaginar. Los cálidos abrazos, la serenidad de los tiernos goces, el equilibrio del cuerpo y la experta sexualidad que resume las vivencias de los años anteriores...”

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BAJO EL ASOMBRO DE DIOS

Se va descubriendo la amada en un misterioso escenario de strip-tease. Amado y amada tiemblan de pudor y revelación. Se apagó el sol, se encendió la belleza. Un invisible Padre del Mundo aplaude en silencio el sexto día de la Creación: "Y vio Dios que todo cuanto había hecho era muy bueno". Y el poeta Carlos Murciano agradece al Amor los diez peldaños de versos que nos ascienden a la Dicha.

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MOMENTO

Salta el botón, y la seda
de la blusa se desliza
sobre tus hombros. Ceniza
es el momento. No queda
ni un pájaro en la alameda
y el poniente ha dicho adiós.
Sueltas tu falda. Los dos
temblamos. Pálido y mudo,
veo nacer tu desnudo
bajo el asombro de Dios.

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Y TE BESA SU AMOR EN MI LATIDO

La pareja, rezando, se ha quedado dormida. Abriga el Padre sus piedades con un manto de sueño. Es abrazado el compañero como presencia regalada del Dios vivo ("y te besa su amor en mi latido"). Permiten el cariño y la fe llegar a descubrir la naturaleza angélica de la otra persona, su halo de divinidad. El tú próximo es camino, aventura, presencia del Tú infinito. Para conocer algo más del poeta José María Valverde, pulsandoaquí se os irán presentando, en siete páginas de este blog, hasta 17 poemas.

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LA ORACION DE LA NOCHE

Después del día, el ruido, la fatiga,
rezamos un momento, en tanto un velo
de sueño y de ternura nubla el cielo
y anega nuestro amor la noche amiga.

Pero está bien así, que sólo diga
nuestra voz el comienzo. Así el desvelo
de Dios nos ve dormidos en su suelo
y con su piel de sombra nos abriga.

Tú déjale venir, subir sin ruido,
crecer de noche –un río que mañana
habrá llegado al pie de la ventana–,

tú déjale fundirnos en olvido,
pero al dormirte, siente cómo mana
y te besa su amor en mi latido.


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NOS RECETAN A LAS MUJERES LA VEJEZ PREMATURA

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El poema “Mujer irredenta”, de la nicaragüense Gioconda Belli, pertenece al poemario “Apogeo” (Visor, 1998), cuando la fascinante autora celebraba el orgullo de ser mujer desafiando prejuicios sociales que intentaban invisibilizarla. Aquellos valientes versos se dirigían, sobre todo, a mujeres de cuarenta y tantos, que experimentaban, como ella, en sus vidas, la sorprendente aventura de la menopausia (“el cuerpo es mucho más que las hormonas”).

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Desde sus 65 años, acaba de publicar la feminista autora un exitoso poemario “En la avanzada juventud” (Visor, 2013), cuarenta y cinco poemas que proclaman “que la mujer es más que un organismo reproductor, y cuando pasa el tiempo de la fertilidad de su cuerpo es quizás cuando más fértil tiene el alma.” Reflexionando la autora sobre su propósito al escribir el libro, declaraba:

"He llamado a mi nuevo libro de poemas “En la Avanzada Juventud” porque pienso que la cronología es engañosa, y que hay muchas juventudes en la vida y una de las mejores es quizás la que empieza cuando se llega a la madurez, cuando uno ha llegado a saber quién es y qué es lo que quiere..."

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MUJER IRREDENTA

Hay quienes piensan
que he celebrado en exceso
los misterios del cuerpo
la piel y su aroma de fruta.

¡Calla, mujer! -me ordenan-
No nos aburras más con tu lujuria
Vete a la habitación
Desnúdate
Haz lo que quieras
Pero calla
No lo pregones a los cuatro vientos.

Una mujer es frágil, leve, maternal;
en sus ojos los velos del pudor
la erigen en eterna vestal de todas las virtudes.
Una mujer que goza es un mar agitado
donde sólo es posible el naufragio.

Cállate. No hables más de vientres y humedades.
Era quizás aceptable que lo hicieras en la juventud.
Después de todo, en esa época, siempre hay lugar para el desenfreno.
Pero ahora, cállate.

Ya pronto tendrás nietos. Ya no te sientan las pasiones.
No bien pierde la carne su solidez
debes doblar el alma
ir a la Iglesia
tejer escarpines
y apagar la mirada con el forzado decoro de la menopausia.

Me instalo hoy a escribir
para los Sumos Sacerdotes de la decencia
para los que, agotados los sucesivos argumentos,
nos recetan a las mujeres la vejez prematura
la solitaria tristeza
el espanto precoz a las arrugas.

¡Ah! Señores; no saben ustedes
cuánta delicia esconden los cuerpos otoñales
cuánta humedad, cuánto humus
cuánto fulgor de oro oculta el follaje del bosque
donde la tierra fértil
se ha nutrido de tiempo.


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PRESENTACIÓN PPS. A pesar de ser muy conocido el poema de Khalil Gibran “El matrimonio”, siempre nos sorprende su exquisita espiritualidad: “Estaréis juntos en la memoria silenciosa de Dios... Pero dejad que haya espacios en vuestra cercanía. Y dejad que los vientos del cielo dancen entre vosotros...Pulsaraquí.

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NOSOTROS LOS MAYORES,
y la Poesía

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12. Abro las Escrituras para fortalecer mi corazón

ESTOY DELANTE DE TI, por Jacques Gauthier
UNA VEZ AL DÍA, de Paul Roth
ÍNDICE del 1 al 12


13.Los que vivimos solos

AJENO, por Claudio Rodriguez
¡VEN!, por Autor desconocido


14.Viudas sin luto

ÉL SE FUE MUY SERIO, por Carilda Oliver
NO ME CANSO, MI AMOR, YA DE QUERERTE, por Carilda O.
LA VIUDITA, de Carlos Murciano


15.Disfrutar del sexo a cualquier edad

BODAS DE PLATA, por Gastón Baquero
LA PAREJA, por Leopoldo de Luis


16.Entrega completa hasta el final

HOY PARECE..., por Gonzalo Alonso-Bartol
A MI ESPOSA, por Cintio Vitier.


17.Nos recetan a las mujeres la vejez prematura

MOMENTO, por Carlos Murciano
LA ORACIÓN DE LA NOCHE, de José María Valverde
MUJER IRREDENTA, de Gioconda Belli


18.Porque el cielo nos mira y se complace

CÍTARA MÍA, por Gonzalo Rojas
ARRUGAS, por Miguel d'Ors


19.Y es más breve el tiempo del amor

CARA A CARA, de Luis López Anglada
LA AMADA INNUMERABLE, por Bartolomé Mostaza
DÍA DE FIESTA, de Luis López Anglada


20.Cenizas que no se apagan

EL FUEGO ARDÍA LENTO, por Concha Zardoya
AÚN VIVAZ, de Concha Zardoya
"CUANDO DIOS QUISO", de Francisca Aguirre


21.Eres lo que recuerdas

ALGUNA VEZ POR LA MAÑANA..., por Cristina Lacasa


22.Pero el olvido, no, nunca el olvido

ESCÚCHAME, por Antonio Porpetta


23.El album familiar

FOTOGRAFÍAS, por Ginés Aniorte


24.Bendita memoria, bendito olvido

EL QUE TIENE MALA MEMORIA, por Manuel Mantero
TAMBIÉN HAY MUERTOS QUE MATAN, de José Bergamín


25.Nicanor Parra, Centenario Vivo

ENLACE A NUEVE PÁGINAS SOBRE PARRA
ÍNDICE del 25 al 36


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